El canciller de Paraguay, Rubén Ramírez, y el ministro de Relaciones Exteriores de Surinam, Albert Randim, presentaron sus ponencias para ocupar la secretaría General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), en sucesión de Luis Almagro. Ambos proyectos expusieron la confrontación global que protagonizan Estados Unidos y China.
Randim se presenta como el candidato de la izquierda, con un fuerte apoyo del Caribe y una mirada crítica hacia el presidente republicano de Estados Unidos, Donald Trump. Por su parte, Ramírez se esfuerza en buscar un diálogo más amplio, convencido del apoyo de Trump y Milei, pero a la espera de los movimientos definitorios de Lula Da Silva, Gabriel Boric y Gustavo Petro.
En cuanto a los posicionamientos regionales, la histórica relación de Ramírez con el mundo académico y cultural de Argentina, Chile, Perú y Colombia le abrió un diálogo fluido, en el que el mundo diplomático valora la vocación de debate frente al discurso ideológico cerrado que busca imponer el Canciller de Surinam, con el apoyo indirecto de China y una candidatura abiertamente " Anti Trump".
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El canciller de Paraguay, Rubén Ramírez
OEA: el triunfo de Donald Trump y la injerencia de China como observador
Tras el triunfo electoral del candidato republicano y a partir de la designación de Marco Rubio como el primer secretario de Estado latino de la historia, la injerencia directa de Estados Unidos en la geopolítica panamericana adquirió un crecimiento exponencial que puso en agenda inmediata la elección de la sucesión de Almagro. Las cuestiones de protección comercial, la migración, el antiterrorismo y la disputa por el Canal de Panamá (acusando al país caribeño de ocultar negocios comerciales con China) que definió Trump, posicionará a la OEA en un ámbito de primer nivel para esos debates.
Como contó Letra P, el mandatario estadounidense inició una guerra comercial con China al disponer un aumento del 10% en los aranceles de los productos provenientes del país asiático. Este conflicto se intensificó tras la decisión de Xi Jinping de imponer aranceles de entre el 10% y el 15% sobre productos los productos norteamericanos, en respuesta a la medida adoptada por el presidente Trump..