Aunque se quedó con el protagonismo de la jornada, por sus entradas y salidas a la Quinta de Olivos, su diálogo con Alberto Fernández y su rol de articulador con Cristina Fernández de Kirchner, por el momento, el desembarco de Sergio Massa en el gabinete nacional quedó congelado hasta nuevo aviso.
Según pudo saber Letra P, el líder del Frente Renovador le pidió al Presidente “una reconfiguración general” del Gobierno, pero Fernández no aceptó y solo definió un cambio, el nombramiento de Silvina Batakis como ministra de Economía. Ante la negativa a su pedido, decidió seguir como presidente de la Cámara de Diputados.
En el entorno del tigrense aseguraron que Fernández le ofreció la Jefatura de Gabinete, que conduce Juan Manzur, y el Ministerio de Economía, pero que Massa entiende que la crisis del Gobierno no se soluciona con un cambio de nombres si no con una renovación profunda del gabinete.
Hace meses que Massa intenta convencer a Fernández de la necesidad de impulsar el rearmado de la mesa de negociaciones del Frente de Todos (FdT) y una reconfiguración del Gobierno, que incluya un superministerio de Economía, la eliminación de varias carteras y la concentración de la gestión en menos funcionarios, con mayor peso político.
Ese era el plan que tenía sobre la mesa el presidente Fernández para después de Semana Santa y que incluso apoyaban varios integrantes de su mesa chica, como el canciller Santiago Cafiero, pero, sin mediar explicaciones, el Presidente decidió preservar a Martín Guzmán y postergó los cambios, a la espera de resultados positivos en la economía.
A falta de decisión, el ingreso de nuevos nombres, como el de Daniel Scioli, se dio por una carambola que incluyó la abrupta salida de Matías Kulfas, que también cayó apuntado por Cristina. En simultáneo se reincorporó Agustín Rossi, exministro de Defensa, como jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
La renuncia de Guzmán dejó servido el tablero para el recambio, pero nuevamente el Presidente decidió preservarse una cuota de poder y definió el ingreso de Batakis, tras conversarlo con Cristina. En la Rosada no descartan que haya nuevos cambios en los próximos días.
Este sábado, apenas se conoció la renuncia de Guzmán, se especuló con la posibilidad de que Massa desembarcara en el Gabinete. En el entorno del líder del Frente Renovador dijeron que se enteró de la noticia cuando salió de la cancha de Tigre, donde no tenía señal. Después, partió rumbo a su casa y más tarde a un cumpleaños familiar.
El domingo, cerca de las 11 de la mañana, llegó a Olivos para hablar con el Presidente. Salió alrededor de las 14, por el túnel de avenida del Libertador, para reunirse con colaboradores y dirigentes. Volvió a las 17 y trabajó para convencer a Fernández de que hablara con Cristina. La conversación se concretó, pero Fernández y la vice acordaron únicamente la llegada de Batakis.