ROSARIO (Corresponsalía Santa Fe) En medio de la ebullición opositora por darle ruedo al frente de frentes para destronar al peronismo de la gobernación, el socialismo decidió parar la pelota y analizar con detenimiento la jugada. Esta semana pegó el faltazo a la cumbre del no peronismo y se reunió por su cuenta en la Junta Provincial y el Foro de Autoridades Locales del Partido Socialista donde se autoconvenció que no es furgón de cola y que puede plantarse con más peso y otras condiciones en el eventual frente de frentes.
“Que no estemos en la punta de la mesa no significa que no pesemos en la sociedad y tengamos autonomía para manejar los tiempos. Hay que ser orfebre de los momentos”, resumió alguien de la cúpula socialista a Letra P. Su dirigencia dice estar “vigente”, que la gobernación de Omar Perotti realza la gestión del Frente Progresista y jura medir cerca de18 puntos, lo que ceba al partido para competir en 2023 en una interna. “Nos dan bien las encuestas, tenemos peso en diputados y en intendencias, y sabemos cómo jugar las PASO. Somos Bélgica, nadie se la quiere cruzar en semifinales”, se envalentonó alguien que estuvo en el encuentro.
Por eso analizan con otras herramientas y precio el modo de su integración en la alianza opositora que, sin detenerse, acelera su construcción. La idea de poner “condiciones” para la conformación opositora rodó en la boca del exgobernador Antonio Bonfatti durante su exposición, según confió un presente, lo que demuestra el replanteo del partido. Vale recordar que en las elecciones pasadas el socialismo sacó un magro 13%.
En estos últimos meses leen que el clima social fermenta de manera particular y que la sociedad rechaza cada vez con más vehemencia el ombliguismo de la política. “No es momento de fotos de la política. El protagonismo es de la gente y no del político”, dijo esa misma fuente para diferenciarse de la cumbre antiperonista a la que asistió el radicalismo de NEO, el javkinismo y el macrismo entre otros.
En el encuentro que el socialismo realizó también en la ciudad de Santa Fe estuvieron Enrique Estévez y Mónica Fein, ambos con banca en la Cámara baja y, al mismo tiempo, dirigiendo el partido, el exgobernador Bonfatti, los diputados Pablo Farías, Joaquín Blanco y Esteban Lenci, la concejala rosarina Susana Rueda, y los intendentes de Villa Gobernador Gálvez y Santa Fe, Alberto Ricci y Emilio Jatón.
Todos y todas coincidieron en debatir en ese tipo de hábitos “sin apurarse”, más aún si se atrasan las elecciones como adelantó Letra P. Esto es un claro contraste con la cumbre que realizó el resto de la oposición horas antes y generó diferencias marcadas. Jatón fue un poco más allá y dijo estar “orgulloso” de no haber asistido. Por ahora no descartan volver a participar de ese tipo de cumbres pero con motivos concretos sin enfocarse solo en la foto política.