LA PLATA (Corresponsalía Buenos Aires) Los diecinueve intendentes y una intendenta del partido amarillo buscaron construir este viernes una fotografía de unidad que contraste con la guerra que se libra en la superestructura entre el team halcón que presiden el expresidente Mauricio Macri y Patricia Bullrich y el team paloma que comanda Horacio Rodríguez Larreta. Si bien la imagen estuvo incompleta, ya que sólo asistieron once de los veinte dirigentes al almuerzo que se organizó en las afueras del casco urbano de La Plata, primó la idea de organizarse aún más de cara a las elecciones, reforzar la presencia política en los distritos que consideran que pueden ganar y enviar un mensaje a la cúpula bonaerense para que encumbre a un solo candidato amarillo. También ocupó buena parte de la agenda la discusión por el Presupuesto 2023 y los múltiples reclamos de los distritos administrados por Juntos.
Según pudo saber Letra P, el almuerzo -incluyó un amplio menú a las brasas: vacío, asado, cordero, chivito y varios tipos de achuras maridadas con cervezas- que comenzó cerca del mediodía se extendió por más de dos horas y media. En la primera parte de ese tiempo, el intendente anfitrión, Julio Garro, expuso los detalles del encuentro que mantuvo este jueves con el jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, la vicegobernadora, Verónica Magario, y otros representantes del oficialismo y de la oposición, en lo que fue el puntapié inicial de la discusión legislativa de la denominada ley de leyes para 2023.
Luego del repaso de esa agenda, que continuará el martes con una mesa de trabajo legislativa, ahondaron en temas electorales de los tres niveles, aunque todas las fuentes consultadas coincidieron en decir que no hablaron de nombres sino más bien de estrategias generales. En este sentido, cada uno de los presentes tomó la palabra y analizó la situación política de su sección, en la que hubo entusiasmo con la posibilidad de arrebatarle distritos al Frente de Todos.
Los ejemplos fueron numerosos. En la Primera, creen poder ganar Ituzaingó, Hurlingham, Moreno, General Rodríguez, Mercedes y Luján y tener ciertas chances en Escobar; en la Tercera, estiman que pueden volver a pintar de amarillo a Quilmes y obtener buenos resultados en Lomas de Zamora y Esteban Echeverría; mientras que en la Cuarta piensan que pueden triunfar en Carlos Casares, General Pinto, Alem y Pehuajó; no por nada este último distrito quizá sea sede del próximo encuentro antes de fin de año.
Dos intendentes consultados por este medio dijeron también que hubo coincidencias con la propuesta de avanzar con la estrategia de la “Y”, es decir, que haya listas de unidad amarilla en los distritos y en la provincia de Buenos Aires y que las internas sólo se den en el ámbito nacional.
“La gobernación se gana con un voto, necesitamos que se pongan de acuerdo”, remarcó un jefe comunal en referencia a los cinco candidatos que tiene el PRO para disputar la gobernación, los diputados Cristian Ritondo y Diego Santilli, los alcaldes Néstor Grindetti y Javier Iguacel y el senador bonaerense Joaquín de la Torre. “Tenemos que ordenarnos, después de eso estamos dispuestos a competir en todos los niveles con el radicalismo si no quieren conformar fórmulas mixtas”, sumó otro de los comensales del encuentro.
Estuvieron presentes Garro (La Plata), Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Néstor Grindetti (Lanús), Pablo Petrecca (Junín), Iguacel (Capitán Sarmiento), Javier Martínez (Pergamino), Jorge Etcheverry (Lobos), Mariano Barroso (9 de Julio), Gustavo Perie (Ramallo), Lisandro Matzkin (Coronel Pringles) y Soledad Martínez (Vicente López), la única intendenta mujer.
