El Día Mundial de las Abejas logró reconocimiento en la Legislatura porteña, pero el debate posterior generó un "zumbido" por la judicialización de la política en la disputa que mantienen los gobiernos de Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta. El resultado: se frenaron los pliegos de dos fiscales y un juez que ya tenían aval de oficialismo y oposición en la Ciudad. La repartija había terminado 2 a 1 a favor del PJ. El miércoles último, en Labor Parlamentaria, los jefes de los bloques acordaron incluirlos en la sesión. Un día después, retiraron del temario los despachos 031 y 032 y solo se votaron proyectos menores, como el de las abejas, para beneplácito de las relaciones públicas de legisladoras y legisladores.
La versión local de JxC y el Frente de Todos firmaron dictamen en las Comisiones de Junta de Ética, Acuerdos y Organismos de Control y Justicia para la designación de Hernán Gustavo Biglino y Julieta Verónica Villanueva para los cargos de Fiscal de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas y de Karina Giselle Andrade para jueza. Viola Villanueva y Andrade habían sido propuestos por el PJ y cumplieron los trámites en el Consejo de la Magistratura.
Entre la reunión de Labor Parlamentaria y la sesión, Leandro Santoro avisó que no votaría con el bloque. Varios legisladores consideraron "inoportuno" aprobar los pliegos en medio de la pelea entre la Nación y la Ciudad y hasta hubo temor por la ventilación de viejas cuentas y acuerdos.
Hubo cruces de llamadas entre el jefe de asesores presidencial Juan Manuel Olmos, siempre sindicado junto a Daniel Angelici como operador judicial en la Ciudad, y el vicejefe de Gobierno Diego Santilli. Por ahora se rompió la amabilidad habitual entre los dos.
Trascendieron reproches entre la Nación y la Ciudad por la réplica en el fuero porteño de vicios del fuero federal. La Casa Rosada se quejó por el "escandaloso" fallo de la Cámara de Apelaciones que integra Nieves Macchiavelli, hermana del ministro de Ambiente de la Ciudad y que sirvió a Larreta como respaldo en su estrategia. Y la Ciudad por la seguidilla de fallos adversos: la prohibición de la venta de Costa Salguero, el freno al impuesto a las tarjetas de crédito y las multas contra la ministra Soledad Acuña por no cumplir la cautelar que ordenaba a la Ciudad que diera garantías para las clases virtuales.
Tras acordar en tablas, el PRO retuvo las designaciones y sólo se votó una cuarentena de resoluciones y declaraciones, algunas nobles en contra del trabajo infantil o sobre las vacunas y también la entrega de una bandera protocolar a Los Auténticos Decadentes, entre otros. Los platos rotos los pagó la diputada del PRO Mercedes de las Casas criticada por impulsar el Día de las Abejas.
Recalde remixado
La convivencia en el Frente de Todos porteño no es fácil. Hay tensión entre Olmos, jefe del Nuevo Espacio Peronista (NEP), y algunos legisladores que resisten acuerdos preexistentes. De todos modos, Mariano Recalde convocó a un Zoom para subrayar la "unidad" y consensuó una carta pública a Rodríguez Larreta. Como presidente del PJ le "suplicó" a la Ciudad que tome medidas, le propuso "desarmar esta confrontación" y una batería de propuestas contra la pandemia. Sin decirlo, apuntó a incomodar al jefe de gobierno en la interna con Patricia Bullrich, que lo empuja a romper el diálogo con el Presidente.
Recalde hace equilibro junto a la vice del partido, María Rosa Muiños, legisladora y pareja de Olmos. Además, el senador invitó a tomar un café a Matías Tombolini, hoy director del Banco Nación y excandidato a jefe de gobierno por el lavagnismo. El economista le regaló su quinto libro, "La otra campana". Muy dateado, "banca" la gestión de Alberto Fernández y reivindica a Sergio Massa. El presidente de Avancemos por el Progreso Social repitió "sin culpa" que cree que "se agotó el sueño de la avenida del medio".
La tentación de Macri
En Córdoba se desordenaron las cosas. Las minivacaciones con golf de Mauricio Macri en Alta Gracia y su intento por imponer a Gustavo Santos como candidato a senador dejaron tendal de enojos. Entre los dirigentes de Juntos por el Cambio circuló un borrador con sutiles reproches. "La precariedad institucional a la que nos está llevando el kirchnerismo, requiere de una gran responsabilidad en la dirigencia de Juntos por el Cambio, la que debe eludir comportamientos que pongan en riesgo su fortaleza", arranca el texto al que accedió Letra P. Y agrega que "es indispensable que en las próximas elecciones presentemos a la sociedad candidaturas construidas de abajo para arriba, representativas de cada territorio". En el mismo documento se advierte: "Debemos cuidar que dirigentes de otros distritos entiendan y respeten nuestra fortaleza", y cuestionan "la tentación personalista". "Que la realidad de otras jurisdicciones no se imponga en nuestra provincia", concluye el escrito.
Sucedió allí algo más preocupante. Dirigentes que participaron de distintas reuniones que en el último mes tuvieron al exmandatario como protagonista, se sorprendieron porque no usa barbijo y porque pide a los demás que se los quiten para hablar delante suyo. En al menos dos de esas charlas tuvo contacto estrecho con dirigentes que en ese momento tenían activo el virus del Covid. Le pasó con el vidalista Alex Campell y en Córdoba con el diputado Alberto Ambrosio, que dos días después debió ser internado en la terapia intensiva del Hospital San Roque. Macri, que negó haber recibido la vacuna, siempre se ve poco temeroso y muy confiado. Todos los participantes de la cena se tuvieron que hisopar.
El hombre de la Bolsa y los soplones rurales
El que no corrió riesgos fue Adelmo Gabbi, votante confeso de Macri. Después de un año de obligado descanso institucional, el jueves fue elegido para volver a presidir la Bolsa de Comercio. La asamblea se hizo vía Zoom y entre los que no ahorraron elogios estuvo el empresario Adrián Werthein, que habló conectado desde el interior de su vehículo.
No hubo humor en otro Zoom donde se discutió la intervención en el mercado del trigo. Si no se viralizaron los detalles al nivel del affaire de Horacio Cabak fue porque la guerra gaucha no es cosa del corazón. Después del debate en ArgenTrigo, institución que preside Miguel Cané, el diario Página 12 sacó a la luz el reclamo del ex jefe de gabinete de Agricultura Santiago del Solar para que sus pares vuelvan a levantarse en contra del Gobierno. La propuesta fue rechazada y el exfuncionario renunció y acusó de "soplones" a los participantes de la reunión. Lo apoyaron los exministros de Buenos Aires, Leonardo Sarquís, y de la Nación, Luis Miguel Etchevehere, que habló de "entregadores" y pidió que renuncie la directiva. El ex de Macri integra el ala dura del antikirchneralbertismo, está muy activo y con intenciones de hacer carrera política.