A más de ocho meses de dejar el poder, el expresidente Mauricio Macri se convirtió en uno de los dirigentes con la peor imagen de la Argentina. Lejos de la crisis sanitaria y económica del país, disfruta del verano europeo junto a su familia en la Costa Azul y, desde allí, milita la anticuarentena vía Zoom. "El modelo de cuarentena sin salida del Gobierno no va más", aseguró el exmandatario durante un encuentro virtual que mantuvo esta semana con los principales dirigentes de Juntos por el Cambio. Sin embargo, aún no dio pistas sobre si piensa pelear por una banca en las elecciones legislativas de 2021.
El analista político Jorge Giacobbe cree que Macri "no quiere ser el líder de la oposición" y se lo imagina "buscando otra vida". "En el mejor de los casos, lo imagino como un referente no peronista que logró terminar su mandato", señala.
En diálogo con Letra P, el director de la consultora Giacobbe & Asociados también analizó la interna del oficialismo de cara a los comicios del próximo año y aventuró que el kirchnerismo "va a querer ocupar toda la lista de candidatos" a legisladores porque es "el socio mayoritario" del Frente de Todos.
-¿Cree que las PASO son útiles y necesarias?
-Implican un doble esfuerzo y un desgaste para los partidos más pequeños, lo cual es contraproducente porque la campaña termina polarizándose. No es un gran instrumento. Entiendo que vienen a reemplazar a las elecciones internas, pero desalientan mucho a los partidos nuevos que se tienen que presentar a competir dos veces .
-¿Las elecciones de 2021 serán un enfrentamiento entre los sectores duros y los moderados?
-En este momento, hay un enfrentamiento dentro del oficialismo y la oposición entre los duros y los moderados. El socio mayoritario del Frente de Todos es el kirchnerismo y, aunque no tenga la lapicera, va a querer ocupar toda la lista de candidatos y el peronismo histórico va a tratar de meter algún candidato. Hay que ver cómo se resuelve esa interna.
-¿Sergio Massa es el articulador entre el sector duro y el moderado del Frente de Todos?
-Sí, Massa es un nexo con Máximo Kirchner. No creo que haya un quiebre del Frente e Todos en las legislativas, no sería negocio.
-¿El armado de listas será un desafío para mantener la unidad en el Frente de Todos?
-Sí, pero el kirchnerimo querrá ir por todo porque es el socio mayoritario del partido. Su principal fortaleza está en la cantidad de votos, que es lo más importante en una elección. Eso va a provocar tensiones.
-¿Y qué puede ocurrir en Juntos por el Cambio?
-Hay tres estrategias para seducir a ese casi 43% que quiere que el oficialismo pieda las elecciones (según la última encuesta de Giacobbe & Asociados): los que prefieren no asomar la cabeza como María Eugenia Vidal y Mauricio Macri; los que gestionan y se muestran colaborativos como Horacio Rodríguez Larreta y los combativos como Patricia Bullrich. Lo más importante será ver quién tiene la imagen negativa más alta, que en este caso es Macri, y poder encauzar esas tres estrategias en una sola.
"Larreta es como un administrador de un consorcio de propietarios: la gente lo valora por su gestión pública"
-En los últimos meses, la imagen de Larreta creció mucho. ¿Se encamina a ser el nuevo líder de la oposición?
-El de Larreta es un caso pecualiar, porque es un dirigente sin carisma pero tiene una imagen positiva muy alta. No enamora, pero tampoco genera odio. Es como un administrador de un consorcio de propietarios: la gente lo valora por su gestión pública. Dentro del desastre que está ocurriendo, se está transformando en el nuevo líder. Pero hay que ver qué ocurre cuando termine la pandemia.
-¿Qué rol va a jugar Macri en este armado de la oposición?
-No quiere ser el líder de la oposición. Lo veo más cómodo buscando otra vida. Tampoco lo veo haciendo cosas para volver a ser candidato a presidente. Hay que recordar que a Cristina no le daban los votos para ser presidenta en 2019 y tuvo que armar una fachada, que fue el Frente de Todos.
-¿Macri podría volver al poder armando un plan como lo hizo Cristina?
-No. Cristina es animal político. A Macri, en el mejor de los casos, lo imagino como un referente no peronista que logró terminar su mandato.
-¿Resolver la deuda con los acreedores externos ayuda electoralmente a Alberto Fernández?
-Sí, supongo que el acuerdo tendrá un impacto en la opinión pública. No obstante, arreglar la deuda también implica empezar a construir la economía y hay que ver si tiene la capacidad.
