Mientras dure la cuarentena, el Congreso trabajará en forma remota, pero contará con un comité de crisis integrado por diputados oficialistas y opositores que tendrán a mano el teléfono rojo para monitorear con el Gobierno el desarrollo de la pandemia por el coronavirus, las políticas de aislamiento para frenar la cantidad de contagios y la comunicación con todos los miembros de cada cámara.
La centralidad de la comunicación con el Ejecutivo la tendrá una mesa que integran a los jefes de bloque que se reunieron el martes con el ministro de Salud, Ginés González García y que este miércoles fueron recibidos por el presidente Alberto Fernández. Ese comité contará con un enlace de prensa de cada bloque para unificar la comunicación de eventuales medidas de emergencia y está integrado por los titulares de los principales bloques: Máximo Kirchner (Frente de Todos), Cristian Ritondo (PRO), Mario Negri (UCR), Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica), Eduardo "Bali" Bucca (Consenso Federal), José Luis Ramón (Unidad y Equidad Federal), Nicolás Del Caño (PTS - Frente de Izquierda) y Romina Del Plá (Frente de izquierda y de los trabajadores). En el Senado, los contactos correrán por cuenta del radical Luis Naidenoff, el macrista Humberto Schiavoni y el peronista Jorge Taiana.
En los bloques opositores y oficialistas también confirmaron que ese equipo estará acompañado por las diputadas Cristina Álvarez Rodríguez (Frente de Todos), Brenda Austin (UCR), Silvia Lospennato (PRO) y sus colegas Álvaro González (PRO) y Juan Manuel López (Coalición Cívica). Con ellos coordinarán Rodrigo Rodríguez, secretario administrativo de la Cámara, y Juan Manuel Cheppi, secretario general del cuerpo, que reportan al titular de la Cámara, Sergio Massa, y actuarán para accionar los mecanismos de funcionamiento virtual o para organizar una eventual sesión, en caso de que sea necesaria a partir de las medidas que disponga el Ejecutivo.
Los vasos comunicantes entre oficialistas y opositores, siempre en forma remota, buscarán mantener informados a sus pares de cada bloque, pero también apuntarán a secundar a sus principales interlocutores con el Ejecutivo. En Juntos por el Cambio, el mayor contacto corre por cuenta del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, y en segundo plano por los gobernadores radicales: el mendocino Rodolfo Suárez, el jujeño Gerardo Morales y el correntino Gustavo Valdés. En rigor, esa instancia de coordinación arrancará ahora, después de las medidas que definió el Presidente con todos los mandatarios provinciales este jueves. En el bloque opositor confiaron que, por ahora, han buscado contener las preocupaciones que generaron en el oficialismo el cierre de algunas fronteras provinciales sin consulta ni coordinación con la Nación.
La iniciativa de coordinar y unificar la comunicación fue planteada el martes en el encuentro con el ministro de Salud, pero también fue impulsada por el senador radical Martín Lousteau, que también se la hizo llegar al Presidente, al igual que las sugerencias para acelerar el aislamiento, entre otras medidas, que impulsó el diputado y médico Bucca.
En algunos bloques, como el PRO, también habrá un monitoreo de la situación económica, en manos del diputado nacional por Santa Fe Luciano Laspina y el exministro de Economía, Hernán Lacunza. La cuestión sanitaria será coordinada para el interbloque de Cambiemos por el ex secretario de Salud y sanitarista radical Adolfo Rubinstein.
Así como el ministro González García le entregó un informe sobre la situación a cada diputado presente -que luego pasó a formar parte esa mesa de crisis-, por esa red serán distribuidos los reportes elaborados por el Ejecutivo en materia sanitaria, de transporte y del Comando Unificado de Seguridad que comenzará a enviar actualizaciones sobre controles de fronteras y ampliación de restricciones al tránsito de personas y mercaderías.