“Quiero ser”. La frase se repite en reuniones privadas de la oposición y da cuenta de las intenciones electorales de numerosos dirigentes provinciales, seccionales y locales, y que es acompañada de una resistencia militante ante el intento de eliminación de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que impulsa el oficialismo. El objetivo final de Juntos por el Cambio (JxC) es sostener esta herramienta para definir candidaturas y evitar una sangría orgánica ante la posible proliferación de disputas internas en al menos una treintena de distritos clave del conurbano y del interior bonaerense.
Vidal en un encuentro de los sin tierra en 2019
En efecto, la iniciativa de gobernadores y gobernadoras de suspender las primarias de 2021 choca contra los intereses de una oposición en plena etapa de reorganización y definición de nuevos liderazgos, tanto en la superestructura como en los distritos.
Los efectos de esos ordenamientos van más allá de 2021. De acuerdo a cómo se perfilen las listas y –lógicamente- el resultado de las elecciones de medio término, quedará plantado el mapa opositor de cara a la pelea por la gobernación en 2023, a la que ya se anotan los intendentes Jorge Macri (Vicente López) y Gustavo Posse (San Isidro) y el dirigente Emilio Monzó.
Conurbano e interior
Según pudo saber Letra P a partir de consultas con armadores de la alianza opositora, en Juntos por el Cambio esperan más de una boleta en Marcos Paz, Moreno, Morón, Hurlingham, Ituzaingo, San Martín, San Isidro, Luján, Merlo y Mercedes, todos distritos de la Primera, sección clave –junto a la Tercera– por el volumen de votos de todo el territorio.
En la Segunda, los cruces se darían en Zárate, San Pedro y San Andrés de Giles, y de la Tercera sección, se prevé competencia en Esteban Echeverría, Lomas de Zamora, Avellaneda, Ezeiza, Quilmes, Berisso, San Vicente y Berazategui. En la Quinta, JxC debe resolver interna en La Costa, General Lavalle, Chascomús y Necochea; mientras que en la Séptima tiene frente interno en Bolívar y 25 de Mayo.
El caso de la Cuarta y la Sexta secciones podría ser algo diferente. En la primera región, el intendente de Junín, Pablo Petrecca, podría funcionar como ordenador al ser el jefe comunal opositor de mayo peso en la región. Allí, el radicalismo tiene a Franco Flexas en General Viamonte. Mientras que en la segunda región, en el sur, por el orden que emana del intendente Héctor Gay (Bahía Blanca) y sus escoltas legislativos, la senadora Nidia Moirano y el diputado Santiago Nardelli, la cosa se encaminaría un poco aunque no del todo: el poder territorial de los jefes comunales del radicalismo también juega.
Casos testigo
“En los lugares donde gobernamos, obviamente no habrá PASO”, aclararon en el partido amarillo, lo que abre la posibilidad de peleas abiertas en todos aquellos territorios conducidos por el Frente de Todos y el vecinalismo. Un caso testigo se puede observar en Quilmes, que, tras la derrota de Martiniano Molinia, surgieron nuevas propuestas como la de la senadora provincial Lorena Petrovich. Un mapa similar se observa en Pilar y Morón.
Es que en la mesa de conducción de la Primera sección observan tanto a Nicolás Ducoté como a Ramiro Tagliaferro con intenciones de presentarse como candidatos a concejales en 2021, con el objetivo de ganar terreno local e intentar un segundo mandato al frente del municipio en 2023.
No es momento
Si bien buena parte de los líderes de Juntos por el Cambio se mostraron a favor de la eliminación de las PASO, como el propio presidente del PRO bonaerense, insisten en que no es el momento. Kicillof, que hasta el momento evita una definición al respecto –“No conviene discutir el sistema electoral entre gallos y medianoche”, dijo en entrevista con Letra P– necesita del visto bueno de la Legislatura para avanzar; con un Senado dominado por la oposición, cualquier reforma requerirá del acuerdo amplio.
En este sentido, los senadores Gabino Tapia y Lucas Fiorini dijeron a este medio que no están dispuestos a acompañar una suspensión, aunque sí pretenden instalar el tema de cara al futuro a partir de una “reforma integral” del sistema electoral que incluya la posibilidad de una boleta única o desdoblamiento de las elecciones.
