El jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, trazó un balance del primer mes de gobierno de Alberto Fernández, en el que dijo que se aplicaron "políticas fueron una clara orientación, con valores que se expresan de otro modo y con políticas orientadas a otras prioridades". Asimismo, habló de la decisión de la Casa Rosada de alcanzar un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional que pueda ser cumplido y se refirió a uno de los temas más polémicos de la agenda inmediata: la posibilidad de reducir los recursos coparticipables que recibe la Ciudad de Buenos Aires. Esta última decisión todavía "no se tomó", señaló, pero argumentó sobradamente en favor de esa posibilidad.
En ese sentido, Cafiero relativizó el argumento de que el aumento de copartipación en favor de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fijado por el gobierno de Cambiemos esté vinculado con el traspaso al distrito de la Policía Federal. Esa medida ocurrió, dijo, "seis meses después" del incremento de la coparticipación y remarcó que incluso ese monto "está por encima de la masa salarial de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires".
"No se ha tomado aún la decisión. Lo que estamos haciendo es tratar de hacerle entender al gobierno de la Ciudad que a ellos se les dio un privilegio apenas se inició el gobierno de (Mauricio) Macri. Y se lo dio Macri. Y eso es cuestionable porque es un privilegio a la ciudad más rica del país", reflexionó Cafiero en una entrevista que publicó este domingo el portal Infobae.
"Eso es lo que está en estudio. Eso es lo que buscamos ver en el diálogo. Es que esa coparticipación no fue por ley, se dio por decreto. Hay que ponerse de acuerdo", insistió, en referencia a un tema de potencial conflictivo importante, por afectar al distrito que gobierna Horacio Rodríguez Larreta, referente del PRO y de Juntos por el Cambio.
Consultado sobre si la decisión del Gobierno nacional sobre la capital tiene un componente ideológico, Cafiero aseguró que "nosotros no nos manejamos por identidades políticas de nadie. Para nosotros los gobernadores son parte de la Argentina, más allá de las ideologías", subrayó.
En otro orden, el jefe de Gabinete afirmó que el Gobierno no presentará un plan económico al FMI "por la necesidad de algún sector y después cambiarlo", y sostuvo que "las improvisaciones ya las hizo" la gestión anterior.
Cafiero recordó que la administración de Juntos por el Cambio informó varias veces "metas de inflación que después no se daban" y hasta anunció "tres veces" el acuerdo con el FMI, incluso en boca del expresidente Macri, cuando ese entendimiento todavía no está sellado.
"Eso hace perder mucho prestigio a la Argentina", juzgó y, por eso, dio a entender que el gobierno del Frente de Todos será cauteloso a la hora de comunicar algo, según le dijo a Infobae.
"Si no recuperamos prestigio, se pierde credibilidad. Si no tenemos credibilidad, no podemos negociar en buenas condiciones y mucho menos generar un plan que tenga un horizonte y desarrollo de los próximos cuatro años", reflexionó.
Además, planteó que el proyecto económico "tiene diferentes aristas: la deuda social, la deuda interna, la deuda externa, la estabilización macroeconómica, todas variables que deben encontrar un ecosistema de equilibrio".
En ese sentido, el funcionario destacó el encuentro que se dio el mes pasado entre el Gobierno y los referentes de los sectores más importantes de la economía, que priorizó la búsqueda de un acuerdo para que "todos tengamos el valor de la solidaridad para adelante porque hay una situación compleja y grave" en el país. Así, la renegociación de la deuda pública, afirmó, debe contemplar la generación de empleo, el desarrollo, la industria local, la distribución de la riqueza y las necesidades de las economías regionales.
"¿En qué se avanza con la deuda? Nosotros estamos avanzando con las negociaciones. Las está llevando a cabo el equipo de Economía, de Martín Guzmán, y eso tiene sus tiempos y sus velocidades. Los adelantos que se vayan teniendo van a ser públicos, y me parece que es una novedad: va a haber una negociación de cara a la gente", señaló.
En el plano internacional, defendió la revocación de las cartas credenciales de Elisa Trotta, la "embajadora" designada por el titular de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó. Según Cafiero, el Gobierno ha retomado la tradición de respecto a la autodeterminación de los pueblos, busca "herramientas y salidas de paz, favorecer la democracia a partir del diálogo y la participación". "Con respecto a esto y a la embajadora Trotta, ella tenía un plazo porque la Asamblea Nacional tenía un plazo, que es lo que vimos el fin de semana pasado. Con lo cual la Cancillería argentina entendió que esos plazos se terminaban, cuando se terminaba la gestión de la Asamblea Nacional, y esa fue la decisión que se tomó", añadió.
Con respecto al primer mes de gestión aseveró que "lo que sí tenemos es una gravedad muy profunda con la crisis que tuvimos que afrontar, que estamos afrontando (y) sigue sin resolverse. Fue un mes de mucha tarea, de mucho trabajo, en el que pudimos avanzar en distintas políticas y que creo que más que luna de miel lo que tuvieron las políticas fueron una clara orientación con valores que se expresan de otro modo y con políticas orientadas a otras prioridades". "Me parece que lo que hubo fue que no hubo estafa, no hubo estafa electoral. Alberto y Cristina (Kirchner) en la campaña hablaban de la necesidad de tomar este tipo de medidas o de apuntalar este tipo de prioridades y en esa línea vamos", añadió.