Alberto "Nacho" Biglieri está vinculado al radicalismo desde antes de empezar a caminar. Su padre, el periodista e histórico dirigente de la Unión Cívica Radical (UCR) de Lanús, Yolivan Biglieri, se batió a duelo en Monte Chingolo con el almirante Benigno Varela por el derrocamiento del presidente Arturo Illia y, años después, el Ateneo Radical de esa localidad de Lanús lleva su nombre, como también la calle en la que se ubicaba su diario Autonomía. Con una larga trayectoria en la política bonaerense y universitaria, Biglieri llegó al Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires por el estamento político y con el apoyo del radicalismo porteño y, especialmente, del sector de Daniel "Tano" Angelici.
"Nacho", apodo que arrastra desde sus años como presidente de Franja Morada en la UNLZ, atravesó la mayor parte de su carrera en la conducción del Colegio de Abogados y la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (UNLZ), donde obtuvo su diploma de abogado especialista en derecho administrativo. En 2003 fue candidato a intendente de Lanús por la UCR, pero la implosión del radicalismo pos crisis del 2001 le trajo un duro revés electoral y se mudó a la Ciudad de Buenos Aires.
Siempre volcado a su experiencia académica, tuvo un paso por el gobierno porteño de Jorge Telerman, donde acompañó al ex presidente de la AMIA Agustín Zbar como director de Asuntos Jurídicos en la Procuración General de la Ciudad. Tras varios años en la vicepresidencia de la Caja Previsional de Abogados de la provincia de Buenos Aires, se integró al equipo jurídico del consejero porteño Sebastián De Stefano, también del sector de Angelici.
Biglieri asumió votado por la Legislatura porteña, junto al macrista Francisco Quintana y Ana María Salvatelli, que llegó al organismo de Diagonal Sur con el respaldo del peronismo porteño. Biglieri fue el candidato de consenso entre Angelici - con mucha gravitación en la estructura judicial capitalina- y Emiliano Yacobitti, al frente del sector de Enrique "Coti" Nosiglia en la negociación entre el PRO y el Tano por el reparto de listas de los cargos en disputa en la Ciudad.
El CV de Biglieri recorrió los despachos de Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau. Ni el jefe de Gobierno ni el senador electo plantearon objeciones, como tampoco la Legislatura: al igual que Quintana y Salvatelli, su pliego transitó el Parlamento local sin impugnaciones. Los tres entraron y salieron por un tubo, merced al acuerdo político entre la UCR, el PRO y el PJ, como contó Letra P.
Biglieri extiende sus relaciones hacia al Consejo de la Magistratura Nacional, donde jugó fuerte por las agrupaciones del interior que acompañaron a Miguel Piedecasas y Marina Sánchez Herrero, también de vínculo estrecho con el radicalismo. También, juega en tándem Diego Molea, otro consejero nacional a quien conoce del mundillo judicial lomense y que, a su vez, ejerce como rector de la UNLZ.
Desde la UCR mantuvo vinculación con Cambiemos y en 2018 militó activamente por las listas de la coalición de gobierno en la Magistratura nacional y la porteña.
