La subsecretaria de Turismo de la provincia de Buenos Aires, Martina Pikielny, hizo una lectura positiva de las frenéticas jornadas de los mercados, que provocaron un aumento histórico del dólar y que dejaron en una crítica situación a la administración que encabeza Mauricio Macri. “Hay una oportunidad que estaría bueno aprovechar”, dijo al ser consultada sobre el impacto de la suba de la divisa para el turismo nacional.
Pocos sectores podrían verse beneficiados por la crisis económica que por estos días sacude al país. El turismo nacional es uno. El incremento de la moneda estadounidense, lejos de perjudicarlo podría ser una importante inyección, dado que provocaría que una significativa fracción de turistas que, eventualmente, elegirían destinos del exterior se inclinen por la oferta nacional ante la elevación de los costos de la propuesta internacional. La cifra crece si se tiene en cuenta el ingreso de turistas extranjeros.
Así lo confirmó ante la consulta de Letra P la responsable de Turismo de la Provincia, Martina Pikielny, quien consideró que con el aumento de la divisa “hay una oportunidad que estaría bueno aprovechar”. Los dichos de la funcionara vidalista están en sintonía con las expresiones del intendente de General Pueyrredón, Carlos Fernando Arroyo, quien el jueves celebró que con la escalada del dólar “nadie pueda viajar al exterior”.
Pikielny - que este viernes firmó un acuerdo de cooperación turística entre Buenos Aires y las provincias del norte argentino - sostuvo que hay que lograr que “los precios del dólar no se trasladen a toda la cadena del valor turístico”, de manera que desalienten la oportunidad de crecimiento del sector. En esa línea, y atendiendo a la variación de precios que se ha venido dando en los últimos meses, la funcionaria aseguró que ya “hay repercusiones” y que se está “viendo una tendencia decreciente de turismo que sale al exterior”, escenario que “ayuda a que (los turistas) elijan la Argentina”.
El impacto negativo para el sector por la suba del dólar podría darse por una caída del visitante habitual de los destinos locales, teniendo en cuenta que la disparada de la moneda extranjera implica una mayor inflación y pérdida del poder adquisitivo, factores que pueden influir en un gran porcentaje de población que, eventualmente, podría resignar las vacaciones ante la crisis.
La funcionaria, además, señaló en rueda de prensa que de cara a la temporada 2019 trabajarán “fuertemente en una campaña de promoción masiva en las diferentes regiones de la provincia” y además en un “acuerdo de precios con el sector”, que incluirá hoteles y transporte.