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Limones amarillos: Macri celebra con ex socio de papá Franco y aportantes de campaña

Los ganadores de la mini apertura de Trump. Una empresa a cargo de quien supo fundar citrícola con el padre del Presidente. Otra, manejada por familia que puso medio millón en la elección bonaerense.

En días donde las importaciones de carne de cerdo estadounidense y las restricciones del gobierno de Donald Trump al biodiesel argentino son signos que acentúan la deficitaria balanza comercial con el país del norte, el Gobierno elige quedarse por estas horas con lo que hay de lleno en este vaso: la regreso al mercado norteamericano del limón argentino, tras 17 años. El presidente Mauricio Macri celebra este miércoles en Tucumán el primer envió limonero a Estados Unidos y, como todo festejo, lo hará en un clima ameno, rodeado de los grandes ganadores de esta reapertura, empresarios que, por un lado, supieron ser socios -en esta actividad- de su padre, Franco Macri, y, por el otro, realizaron suculentos aportes monetarios en la última campaña de Cambiemos en la principal jurisdicción del país, la provincia de Buenos Aires.

 

La actividad presidencial, que incluye recorrida, reunión con la mesa citrícola y el posterior acto, se realiza en las instalaciones de Argenti Lemon, compañía que encabeza un viejo conocido de los Macri: Álvaro Carlos Bulacio, un ingeniero químico con máster en la Universidad de Boston (EE.UU) que el 15 de octubre de 1991 constituyó con el padre del hoy jefe de Estado la Sociedad Anónima Citrus Trade Famaillá, que no tardó en ser rentable, facturando alrededor de 25 millones de dólares al año y exportando el 70% de su producción, basada en limones.


 

Facsímil de la edición del 30 de octubre de 1991 del Boletín Oficial, donde se da cuenta de la sociedad Macri-Bulacio.

 



Cinco años más tarde, en octubre del 96, Clarín informó que el Grupo Macri, en sociedad con Bulacio, vendía esta incipiente empresa limonera por 23 millones de dólares al Grupo Bemberg, que controla otro de los pesos pesados de este mercado: Sociedad Anónima San Miguel. Dos meses más tarde, Bulacio dejaba el directorio de Citrus Trade Famaillá para abrir paso a los representantes de San Miguel, entre ellos, Fernando Oris de Roa, quien en la actualidad es ni más ni menos que el embajador argentino en Estados Unidos.

 

Un año más tarde, el 30 de noviembre de 1997, Citrus Trade Famaillá fue completamente absorbida por fusión por San Miguel.

 

Inmediatamente después de que Franco Macri y Álvaro Bulacio se desprendieron de la empresa que fundaron en 1991, el ingeniero tucumano conformó Argenti Lemon, empresa bajo la cual este miércoles vuelve a abrirle los brazos a un Macri.

 

EMBAJADOR LIMONERO. Oris de Roa se desempeñó entre julio de 1993 y abril de 2002 en la empresa limonera San Miguel, batiendo récords de ventas de ese cítrico a nivel mundial. También, supo presidir la Compañía Continental de Cereales y estudió políticas públicas en Harvard. Antes de desembarcar en la embajada argentina en Estados Unidos, trabajó en la Subsecretaría de Inversiones del Ministerio de Modernización, Innovación y Tecnología de la Ciudad, que hasta diciembre de 2017 conduciría Andrés "Andy" Freire. Ambos se conocen del mundo empresarial y trabaron amistad producto de su condición de emprendedores.

 

FAMILIA APORTANTE. En tanto, la empresa que absorbió a Citrus Trade Famaillá también cuenta con ADN amarillo. Firma de las familias Miguens y Otero Monsegur, Sociedad Anónima San Miguel es presidida por Gonzalo Tanoira Miguens, hijo de María Luisa Bárbara Miguens Bemberg, quien en las elecciones legislativas de 2017 fue una de las máximas aportantes a la campaña bonaerense de Cambiemos: su contribución fue de $437.500. Pero no fue la única, Miguens, en hacer un generoso desembolso a los esfuerzos de campaña oficialista. Su hermano, Carlos José Miguens Bemberg, realizó una donación de $125 mil, por lo que el aporte de esta familia ascendió a más de medio millón de pesos.  

 

Mano derecha de Carlos José, Gonzalo Tanoira figura como director no ejecutivo del Grupo Sadesa, holding energético en el que su tío confluye acciones con el mejor amigo del Presidente, Nicolás Caputo.


 


Graduado como licenciado en Administración de Empresas en la Universidad de Belgrano y con un máster de la Universidad de Pennsylvania (EE.UU.), Tanoira ponderó, en declaraciones a El Cronista, la apertura del mercado norteamericano: "Es muy importante el proceso por el que está pasando la Argentina para nosotros, que competimos y tenemos el 90% de la facturación en consumidores globales. El proceso es bueno porque nos abre nuevos mercados".

 

Para 2018, se estima que la Argentina le venderá a Estados Unidos entre 12 mil y 14 mil toneladas de limones frescos, por un valor de aproximadamente 30 millones de dólares. Claro que esto sólo repercutirá con cierta fuerza en Tucumán en general y en un escueto abanico de empresas exportadoras en particular, entre las que figuran como protagonistas San Miguel y Argenti Lemon.

 

Así dadas las cosas, mientras desde diversos sectores de la economía doméstica se analiza la incidencia de la reapertura norteamericana a este cítrico versus el impacto de la llegada de carne de cerdo y las limitaciones comerciales al biodiesel, en lo que no existen dudas es en que los limones son amarillos.

 

Martín Llaryora, gobernador de Córdoba.
Javier Milei en el Foro Económico Internacional de las Américas.

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