El presidente Mauricio Macri suspenderá su descanso en el sur patagónico. Pero no lo hará para retomar la agenda oficial, sino para mirar el partido entre River y Boca por la final de la Copa Libertadores en la Quinta Presidencial de Olivos o desde su quinta privada de Los Abrojos, ubicada también en la provincia de Buenos Aires.
Tras el descanso en Chapelco junto a su familia, el jefe de Estado viajará el domingo por la mañana desde Neuquén hacia la provincia de Buenos Aires. Fanático reconocido de Boca Juniors, Macri quiere mirar la final del a Copa, que se jugará en España, desde su sillón en la residencia familiar Los Abrojos, ubicada en la localidad bonaerense de Malvinas Argentinas. En la quinta privada también suele ver los partidos de la selección argentina de fútbol.
Sin embargo, el mandatario podría pasar el domingo en la Quinta de Olivos y ver la final allí, tras el escándalo por el operativo de seguridad que frustró que el partido se jugase en la Ciudad de Buenos Aires y que generó una sorda interna entre su gobierno y el de gobierno de Horacio Rodríguez Larreta, que terminó con la salida del ministro Martín Ocampo (Justicia y Seguridad) de la administración porteña.
Según consignó la agencia Noticias Argentinas (NA), el presidente decidió regresar el domingo desde Chapelco, donde descansa junto a su esposa, Juliana Awada, y a su hija Antonia, tras las jornadas de actividades que le demandó la Cumbre del G20. Si bien aún no se dio a conocer la agenda de actividades oficiales, el mandatario retomará sus tareas el próximo lunes. Parte del PRO espera que pase por la Cumbre amarilla en Parque Norte.