En el marco del pacto fiscal entre el Gobierno bonaerense y los 135 municipios, en el que se establecen cuatro reglas que deberán cumplir los intendentes para poder continuar recibiendo asistencia del Estado provincial, Vidal apuntó a que bajen las tasas municipales. Pero, como no es competencia del Poder Ejecutivo, el proyecto apenas si invitó a las intendencias a que “armonicen” esos tributos.
Esa invitación tuvo escaso, por no decir nulo, efecto. De hecho, si en algunos casos las subas en discusión o aplicadas son menores es porque los pedidos de los intendentes fueron frenados en los Concejos por los representantes de la oposición, que habilitaron actualizaciones menores.
En La Plata, comandada por Julio Garro, avanzó un aumento promedio del 24%. El proyecto original preveía una suba cercana al 30% que fue reducida a partir de las observaciones de la oposición. En tanto, las valuaciones fiscales más altas sufrirán subas más importantes, que alcanzarán hasta el 50%.
Martiniano Molina, de Quilmes, buscaba aumentar la Tasa de Servicios Urbanos un 29%, pero finalmente se avanzará con el 26%. La actualización fue modificada en la Comisión de Presupuesto, donde la oposición condicionó el incremento pedido del Ejecutivo, señalaron desde el distrito.
Mar del Plata, conducida por Carlos Fernando Arroyo, se encuentra a la espera de que el Gobierno provincial le envíe los fondos de la coparticipación para finalmente presentar el Presupuesto 2018 en el Concejo Deliberante. Por eso se solicitó al cuerpo de concejales una prórroga del período de sesiones en el Concejo. Sin embargo, el secretario de Hacienda de la comuna, Francisco Ridao, señaló al diario La Capital, que se estima que el aumento en las tasas municipales rondará el 30% promedio.
En Lanús, el intendente Néstor Grindetti logró que avanzara un aumento de tasas en torno al 30%, que variará según las zonas. Desde el oficialismo defendieron el pliego remarcando que se exime del pago de la Tasa de Servicios Generales a jubilados y a las industrias y depósitos en la zona cercana al Riachuelo, buscando poder activar la instalación de nuevas empresas o la creación de un polo industrial en la región.
En Pilar, el Concejo Deliberante la aprobó al intendente Nicolás Ducoté la reforma Fiscal y Tarifaria para 2018, que rediseñaba el cálculo de tasas, como la del ex ABL, que pasará a llamarse Servicios Generales, mientras que la Tasa Domiciliaria -Inmobiliaria- se abonará de acuerdo a la valuación fiscal de la propiedad, que en la reforma propone un revalúo del valor del mercado. El pliego fijó aumentos de entre el 25% y el 75%, según los nuevos cálculos. "Que vengan con casos concretos de cuánto van a pagar los vecinos", reclamó el concejal de la oposición Federico Achaval, en diálogo con este sitio.
Ramiro Tagliaferro, intendente de Morón, había anticipado ante Letra P que también plantearía al cuerpo de concejales una “actualización de la matriz impositiva fiscal, porque el municipio cobra las tasas de acuerdo a una matriz de 1955". "Lo que se hacía históricamente era aumentar la carga, pero nunca se actualizaron los metros cuadrados declarados contra la cantidad de metros cuadrados actual”, explicó. En esa línea señaló que, si bien técnicamente no habría un incremento en el porcentaje de la tasas, los vecinos, con esta actualización, “van a tener un aumento que no va a superar el 20%”.
En San Isidro, el intendente Gustavo Posse ya cuenta con las nuevas ordenanzas fiscal e impositiva. El cuerpo legislativo conformado en Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes aprobó un aumento del 10% para el ABL en enero y le otorgó al Ejecutivo municipal la posibilidad de aumentar hasta un 18% más.
Jorge Macri recibió el acompañamiento al pedido de aumento de tasas. Como en San Isidro, el Concejo Deliberante aprobó una cifra y autorizó al Ejecutivo un incremento a lo largo del año. En este sentido, se respaldó un incremento del 15% y se le otorgó al intendente la posibilidad de aumentar hasta un 25%.
El intendente de Pinamar, Martín Yeza, había planteado un incremento del 33%. Sin embargo, los concejales del oficialismo acordaron con el Ejecutivo moderar la suba del módulo "Servicios Generales" en 18%, pero a la hora de la votación sólo se autorizó un aumento del 10.82%. Según precisó un representante de la oposición a Letra P, a partir del 1 de enero entrará en vigencia el aumento aprobado, pero están pendiente de análisis los incrementos en las tasas de seguridad e higiene, para las cuáles el municipio pretende un incremento del 100 y 50% respectivamente.
Esta situación derivó en un conflicto con trabajadores, dado que la salida que propone el oficialismo para compensar la baja de recursos vía recaudación es reducir horas extras y no renovar alrededor de 100 contrato. “Es una medida para generar presión, porque está garantizado el funcionamiento del municipio con ese aumento”, remarcó el edil consultado.
Diego Valenzuela, de Tres de Febrero, logró que se trate la ordenanza preparatoria fiscal e impositiva para el ejercicio 2018 el 23 de noviembre. El pliego no modificó los valores de la tasa de Seguridad e Higiene que pagan comerciantes y propuso un incremento del 19% como tope de aumento en Servicios Generales y el resto de las tasas.
En San Nicolás, Manuel Passaglia, hijo del ahora funcionario vidalista Ismael Passaglia, pidió al Concejo que acompañe el pedido de aumento del 22%, aunque el pliego no fue tratado aún, a la espera de la nueva composición. “Es un aumento mentiroso”, indicó a Letra P un representante de la oposición, que resaltó que "a esto hay que sumarle el cambio de categoría, que se actualiza por los servicios, y eso implica otro incremento”.
Además, se detalló a este portal que el Ejecutivo introdujo un plan denominado de “Alivio Fiscal”, que prevé la eliminación de la tasa de seguridad e higiene a los pequeños comercios y la interrupción de “privilegios” a sindicatos y partidos políticos que están exentos del pago de las tasas de ABL y Servicios Sanitarios. “Esas modificaciones son marketing político, porque en términos económicos nos significan nada”, lanzó el opositor.
En Tornquist, Sergio Bordoni, que días atrás cuestionó el aumento de tarifas, impulsó en su distrito la aprobación de un aumento del 30% para las tasas urbanas y comerciales y del 50% para la tasa vial, publicó La Nueva. La misma cifra avanzaría en Coronel Suárez, conducido por el radical Roberto Palacio.
En Olavarría, Ezequiel Galli presentó al límite de la prórroga el paquete de nuevas ordenanzas. En el texto, el Municipio propone modificar los "importes mínimos mensuales a abonar por los contribuyentes" de la Tasa por Servicios Generales Urbanos y Suburbanos y se detalla que este incremento es de 30%. Además, el intendente pide que se incorpore "el facultamiento al Departamento Ejecutivo para modificar las alícuotas e importes mínimos de la ordenanza impositiva vigentes al cierre del ejercicio inmediato anterior en función del Índice de Precios al Consumidor". "Este punto habilita a Galli a aplicar determinadas subas sin que se requiera la aprobación del Concejo", explicaron desde la oposición a Letra P.
Héctor Gay de Bahía Blanca espera que el Concejo acompañe su pedido de aumento para 2018, que ronda el 27%. Según indicaron desde ese distrito a este portal, el jueves 14 de diciembre se desarrollará la última sesión con la composición actual del Concejo, por lo que las discusiones en torno a las posiciones de este pedido concluirán con la nueva conformación de los bloques, que tendrá al oficialismo con doce bancas.
Miguel Lunghi de Tandil esperó hasta el último día de la prórroga aprobada por el Legislativo para elevar el paquete de proyectos con el presupuesto y la ordenanza fiscal e impositiva para el 2018. En ese marco, el histórico intendente radical plantea una actualización de las tasas municipales del 25% promedio. El estudio y tratamiento de los pliegos recaerá en la nueva composición del Concejo Deliberante.
Fernanda Antonijevic, de Baradero, logró que el Concejo acompañe su pedido de aumento del 25%, pese al rechazo de la oposición, que solicitó un tope del 20%. En tanto, su par de Junín, Pablo Petrecca, pretende que a partir de 2018 los juninenses paguen un 15% más por las tasas municipales.