El gobernador Carlos Verna (La Pampa) volvió a cruzar a las autoridades nacionales por el avance de la obra Portezuelo del Viento tras exigir un "compromiso ratificado" por escrito que garantice un cupo de agua para su provincia. "A Mendoza no le creo nada", disparó el mandatario este miércoles tras una recorrida por el interior pampeano. Como informó Letra P, la represa provocó una crisis interprovincial desde Cuyo hasta el norte de la Patagonia.
En Colonia Barón, donde presidió el lanzamiento del Plan Provincial de Activación Porcina, Verna reiteró que su desconfianza para con las autoridades mendocinas tiene que ver con que “La Pampa firmó un acuerdo en el año 1995 y nunca se pudo hablar de agua; en 2008 firmaron otro convenio y La Pampa lo ratificó en la Legislatura, mientras que en Mendoza dieron vueltas durante 4 años y luego lo rechazaron”, comentó.
“Yo quiero el convenio firmado por el gobernador y ratificado por la Legislatura de Mendoza. No desconfío de (Mauricio) Macri, desconfío del Gobierno de Mendoza”, ratificó.
GANANCIAS. Verna también habló del revés que sufrió el oficialismo en la votación del proyecto de Ganancias en la Cámara de Diputados. En primer término aclaró que “los números que publicó el Gobierno Nacional sobre cuáles eran las pérdidas que ocasionaba cada propuesta para las provincias no son ciertos, porque el dictamen fue consensuado entre distintos partidos", o sea que no es el proyecto que originalmente presentó Sergio Massa, sino que es un proyecto modificado.
El respaldo al ex jefe de Gabinete kirchnerista demuestra la notable sintonía que el peronismo tradicional tiene con él. Letra P informó a principios de octubre sobre los pormenores de la visita a Santa Rosa y de cómo pueden confluir ambos en 2017.
Recalcó que incluso, al igual que el proyecto oficialista, establece impuesto al juego, aunque “se le cobra al juego online y al valor residual de las máquinas tragamonedas. Además, se le reponen las retenciones a las mineras, que este año dejaron de aportar 6.000 millones de pesos y no generaron un solo puesto de trabajo, por eso hay que reponerle las retenciones en un fondo como el de la soja, que se coparticipe entre las provincias y los municipios”, explicó.
Otra de las diferencias en favor del proyecto que se votó es que “se le impuso un gravamen a la renta financiera, porque ese sector fue el único que hizo plata en este primer semestre, hicieron la gran diferencia y no tributan”. Mostró su desacuerdo por el hecho de que el Gobierno Nacional se negó a coparticipar el impuesto al cheque, del que se lleva el 85 por ciento de lo recaudado, y reprochó que “están pendientes de los demás recursos”, pero postergando la situación de los trabajadores en el país.
"El peronismo le está diciendo, al Gobierno Nacional, que hay que gobernar para los 40 millones de argentinos y no solo para una parte, por eso pusieron el Fondo de Emergencia, que salió con el voto del oficialismo, porque había que votar una ley frente a la emergencia, frente a los problemas que tienen los sectores sociales", sostuvo antes de plantear que "cuando yo discuto lo del voto electrónico, no me opongo, digo que hay tiempo para discutirlo, y que ahora hay cosas más importantes”, cerró el gobernador pampeano.