Malestar y cruces en tres secciones electorales del interior. Reclamos para que se respete la trayectoria y el ADN macrista. Efecto derrame de la pulseada mayor.
Jóvenes del PRO en Buenos Aires.
Con el relanzamiento del PRO de Mauricio Macri que en la provincia de Buenos Aires conduce Cristian Ritondo surgieron nuevas caras y liderazgos que, a su vez, impulsan una reorganización de la juventud partidaria bonaerense. En ese plano, la designación de las conducciones distritales genera tensiones que se manifiestan con cruces en las redes sociales, el terreno más fértil para la disputa de las inferiores amarillas.
Todo comenzó cuando la lista bonaerense de unidad que encabezó el titular del bloque PRO en la Cámara de Diputados incluyó entre sus miembros a Camila Manfredi como vocal juventud, quien tiene un rol de jefatura en ese espacio que, entre otras cosas, se encarga de coordinar las conducciones en cada sección electoral. No obstante, la joven que responde a Diego Santilli no tuvo a su cargo la decisión de todas las designaciones, que la plana mayor resolvió distribuir entre las diferentes vertientes amarillas.
En ese marco, en las últimas semanas surgieron planteos desde las bases de la militancia en la Cuarta, Quinta y, principalmente, en la Sexta sección electoral, donde en algunos casos hasta desconocen el liderazgo de las personas nombradas coordinadoras. En el sur bonaerense no cayó bien el nombre del bahiense Nacho Bambozzi, un joven que responde a Ritondo, pero que militó en el GEN y es resistido por el piberío PRO seccional. El malestar fue expuesto en un comunicado en el que las juventudes de Bahía Blanca, Tres Arroyos, Coronel Rosales, Monte Hermoso, Coronel Suárez y Puán pidieron que el nuevo jefe sea reemplazado.
Es una sección particular, donde tiene mucho peso la militancia de Patricia Bullrich, el exintendente Héctor Gay y la exsenadora Nidia Moirano. De hecho, el bullrichismo trabaja aparte en un grupo de WhatsApp con el título “Juventud bullrichista”.
El cruce de ADN de la liga mayor derrama indefectiblemente en las juventudes del partido. El semillero de la ministra de Seguridad planea un encuentro con pibes y pibas libertarias, para cristalizar en las bases el vínculo que ya tienen sus jefes. Ese sector no se siente representado por Manfredi ni por Bambozzi. Sin embargo, en una reunión que mantuvieron este miércoles, Manfredi le encargó al flamante jefe seccional que contenga a todos los sectores que lo resisten.
El otro conflicto surgió en la Quinta sección, una región con mucho volumen de militancia, donde la coordinación quedó para Lucila Cardaci, una joven que se referencia en el pinamarense Martín Yeza y de buen vínculo con el sector marplatense del intendente Guillermo Montenegro. Quien puso el grito en el cielo fue Agustina Marchen, una dirigente que responde al exfuncionario de La Feliz Emiliano Giri, quien tomó distancia de Montenegro y se acercó a las filas de José Luis Espert. Con la decisión de Giri, las chances para Marchen quedaron en el camino.
“Sin ánimos de generar más quilombo del que hay (y sin personalizar la cuestión), yo también esperaba que la nueva conducción se comunique con la JPro de Mardel. Los que están hace mucho saben de nuestro compromiso con el partido y los debates que impulsamos”, fue el mensaje que circuló en el chat interno de la juventud PRO marplatense.
La juventud del PRO en la Cuarta sección también rechazó la designación como coordinadora de Victoria Buaon, referenciada en el intendente de Junín, Pablo Petrecca, la línea jorgemacrista del partido. “Hay varios de la Sexta y Cuarta sección que se están cansando de estas elecciones a dedo. Hay gente que viene hace años militando, conocemos cada parte de la militancia. Es una falta de respeto que no tengan en cuenta a los verdaderos militantes”, se descargó un miembro del sector en el grupo de WhatsApp seccional, que pretendía que la jefatura quedara en manos de una militante de Pehuajó.
En el resto de las secciones la cosa parece estar bajo control, con algunas designaciones de la nueva jefa bonaerense y otras que fueron ejecutadas por la conducción mayor. Esa idea de representar a la mayor cantidad de expresiones dentro del partido se tradujo en los nombramientos de Santiago Buccicardi en la Primera, un joven de confianza de Manfredi oriundo de Pilar; y Lautaro Presenza en la Segunda, un exsecretario privado del intendente de Zárate Marcelo Matzkin.
Néstor Grindetti ubicó a un alfil suyo en la Tercera: Nicolás La Rosa; Bautista Spistale, quien responde al exintendente de Olavarría Ezequiel Galli, coordina en la Séptima; y la Octava quedó en manos de Emiliano Pérez, referenciado en la diputada provincial Julieta Quintero Chasman.
Manfredi tiene la tarea de armonizar los vínculos de todas las vertientes y de revitalizar a una militancia que, explican, había quedado “acéfala” durante los últimos dos años. En el marco del “Nuevo PRO”, presentado por Macri la semana pasada, el partido busca fortalecerse desde el semillero para afrontar los próximos años en la disputa interna con el bullrichismo, y hacia afuera en la pelea por el electorado que pone en juego con La Libertad Avanza.