En la sesión de este jueves en el Senado, Victoria Villarruel se anotó una victoria en su batalla revisionista: la cámara alta avaló el decreto que dispuso una compensación a las 13 víctimas del ataque de la agrupación Montoneros al Regimiento de Infantería de Monte 29, en Formosa, el 5 de octubre de 1975.
El debate sobre el ataque de Montoneros, conocido como “Operación Primicia”, nunca había llegado antes al Congreso porque no prosperaban los proyectos que proponían un reconocimiento económico a las víctimas o sus herederos. Siempre hubo un sector del bloque peronista de turno que se negaba a votarlo.
Recién se trató esta semana por una carambola que acertó Villarruel. Ocurre que tres días antes de abandonar el poder, Mauricio Macri dispuso la compensación a través del decreto de necesidad y urgencia 829, que rige normalmente porque en el Congreso no se rechazó.
En enero, cuando Villarruel quería congelar el tratamiento del DNU 70/23, desempolvó todos los decretos que no se debatieron en el Parlamento y dispuso que se consideren en la bicameral de trámite legislativo. Uno de ellos era el 829/19, que tuvo dos dictámenes a favor.
El momento de Victoria Villarruel
En la sesión de este jueves, el formoseño Francisco Paoltroni, emigrado de La Libertad Avanza (LLA), fue el encargado de proponer el debate del ataque de Montoneros en el Senado. La aprobación en el recinto de un DNU garantiza la vigencia, que rige desde su publicación en el boletín oficial.
La decisión de sumarlo al temario se tomó durante el debate de labor parlamentaria, donde a Unión por la Patria lo representaba el formoseño José Mayans, jefe del interbloque. En esa provincia, cada 5 de octubre es feriado para homenajear a las víctimas del regimiento Coronel Ignacio Warnes.
Villarruel suele viajar a Formosa en cada aniversario para participar de los actos conmemorativos. Es uno de los motivos de su buena relación con el jefe de UP, quien le tiró flores en la última sesión.
Con anuencia de la vicepresidenta, Paoltroni abrió el debate revisionista, aunque no se fue por las ramas y pidió hablar de futuro. “El 62% de la población nació después de 1981. Nadie vivió esta historia. Hay que cerrar viejas heridas y concentrarnos en lo que le haga bien a nuestra gente”, señaló.
Le siguieron los discursos de la dupla formoseña de UP, integrada por María Teresa González y Mayans, quien recordó que vivía cerca del regimiento y conocía a varias de las víctimas.
“Esto es muy importante para el recuerdo de aquellas personas que perdieron la vida en este lamentable hecho. Es un gesto por parte del Senado”, celebró el jefe de UP, ante la mirada de Villarruel y la mayoría de las bancas de su bloque vacías.
El libertario Juan Carlos Pagotto cerró con la frase “¡Acá no se rinde nadie, carajo!", adjudicada al fallecido soldado conscripto Hermindo Luna, cuando la agrupación Montoneros irrumpió en el regimiento y le pidió bajar las armas.
La división peronista
El DNU 829/19 dispone una compensación económica a las personas que defendieron el Regimiento de Infantería de Monte N° 29 “Coronel Ignacio Warnes”, hubieran fallecido o sufrido lesiones gravísimas o graves.
La indemnización para los herederos de las víctimas será mensual equivalente a lo que perciben los agentes de Nivel A, Grado 0 del Escalafón para el Personal Civil de la Administración Pública Nacional.
Quienes sufrieron lesiones recibirán entre un 30 o un 40% de esa suma. Por UP sólo avalaron el DNU Mayans, González, Lucía Corpacci, Sergio Leavy, Guillermo Andrada, Claudia Ldesema, Marcelo Lewandowski y Cristina López.
El bloque peronista tuvo diez abstenciones y 14 ausencias. No hubo ningún voto kirchnerista a favor del DNU. Juliana Di Tullio y Oscar Parrilli se abstuvieron; y camporistas como Anabel Fernández Sagasti o Eduardo De Pedro, no participaron del debate. Tampoco quisieron estar Martín Lousteau y Carolina Losada, por el radicalismo.
El momento de la vicepresidenta
En UP hubo pocas explicaciones entre quienes prefirieron no levantar la mano. La riojana María Florencia López, explicó que la abstención se debía a que el DNU ya estaba vigente y no tenía sentido votarlo. “Este gobierno debería estar cumpliendo con la compensación”, destacó.
La salteña Nora del Valle Giménez, necesitó aclarar que no estaba a favor de la violencia, pero tampoco entendía la necesidad y urgencia de compensar a las víctimas de "Operación Primicia". Un argumento similar sostuvo el santacruceño José María Carambia, que representa a un partido provincial.
El DNU tuvo 40 votos a favor, 12 abstenciones y 20 ausentes. Villarruel esperó la aprobación para tener su momento. “Me tomo una digresión, porque este es un tema cercano a mi labor”, dijo desde el estrado, donde por reglamento no está permitido hacer discursos.
“Los fallecidos eran diez soldados conscriptos de 20 años, un suboficial de 31 años, padre de 2 hijo, un policía de 28 años, padre de dos hijos; y un oficial subteniente de 24 años, hijo de un militante peronista que perdió su carrera durante la Revolución Libertadora”, provocó Villarruel.
“Estás personas nunca fueron reconocidas a nivel nacional. En las gradas debería estar sus familiares, pero después de 49 años, las viudas han muerto y sólo quedan sus hijos, que lo que tendrán hoy es el reconocimiento de la Cámara de Senadores”, cerró la vicepresidenta.