Estará integrada por funcionarios del Gabinete, intendentes, gremios y organizaciones sociales. El gobernador viaja al interior y su presencia en Plaza de Mayo está en duda.
Axel Kicillof y su equipo de gobierno en la marcha de la CGT. Foto: Pilar Camacho.
Columna de la provincia de Buenos Aires
Una columna bonaerense alineada con Axel Kicillof volverá a las calles este miércoles para engrosar la movilización organizada por la CGT, las dos CTA y las organizaciones sociales, con la UTEP de Juan Grabois a la cabeza, por el Día de San Cayetano. La consigna con la que se volverá a apuntar al gobierno de Javier Mileies “Paz, Pan, Techo y Trabajo”.
Los detalles organizativos de la movilización motorizada por el mandatario se definieron este lunes en una reunión de la que participaron diferentes sectores. La dinámica será similar a la de movilizaciones anteriores: bajo la bandera bonaerense, se aglutinarán intendentes, organizaciones sociales y políticas, funcionarios y gremios.
La cita está prevista para el mediodía en Plaza de Mayo. A diferencia de otras ocasiones, Kicillof no estaría allí: tiene previsto visitar Villa Gesell y Lezama, dos distritos de la Quinta sección electoral, para inaugurar centros de atención primaria en salud. “No creemos que llegue”, dijo a Letra P una fuente de la gobernación.
El ministro de Gobierno, Carlos Bianco, dio los motivos por los que estará presente la columna bonaerense: “Vamos a apoyar la marcha porque corresponde”, dijo y explicó que, “en este contexto en el que las políticas de gobierno están impactando muy fuerte en la población, pero sobre todo en los segmentos de menores recursos”, van a sumarse a la protesta “para decir básicamente que cambie el modelo económico”.
“Este modelo de desindustrialización, de desempleo, de caída de los salarios y las jubilaciones ha impactado muy fuertemente sobre el conjunto de la población y nosotros creemos que rápidamente hay que cambiar el rumbo de esta economía, porque no se ve ningún brote verde, está árido, es un desierto y no se ve ninguna luz al final del túnel tampoco”, cerró.
La decisión va en línea con la estrategia que lleva adelante Kicillof de pararse como el principal opositor al gobierno de Milei, confrontando, en los que ya es una guerra de trincheras, el modelo de la Casa Rosada con el de la administración bonaerense.