Fue ideóloga del desembarco de Javier Milei en su provincia natal. Entronizó a su padre como referente local. Agenda antifeminista y negacionismo.
Rebeca Fleitas, reelecta como legisladora porteña, junto a Karina Milei. La entrerriana tiene llegada directa a Martín y Lule Menem.
Rebeca Fleitas se presenta como la primera diputada libertaria de la historia. Ingresó a la Legislatura porteña en 2021, cuando Javier Milei llegó a la Cámara de Diputados. Desde entonces, se convirtió en una vocera reconocida de La Libertad Avanza. Su llegada directa a Karina Milei y Lule Menem la convirtieron en la ideóloga del desembarco en Entre Ríos.
Desde la Ciudad de Buenos Aires, en 2022 digitó junto a su padre los hilos del armado libertario en su provincia natal. Roque Fleitas ingresó a la política de la mano de su hija y fue electo diputado provincial en 2023. Hace unos días se convirtió en el presidente de La Libertad Avanza. El vínculo con Beca sigue intacto y la joven de 36 años no descarta una candidatura provincial.
Nació en 1988, con cinco años de democracia recuperada transcurrida en la Argentina. A sus 36 completó su primer mandato como legisladora porteña y se encamina a comenzar su segundo período a fin de año. Logró su reelección desde el octavo lugar en la lista que dio ganador el domingo a Manuel Adorni. Entre la militancia, algunos la saludaban como “la próxima vicejefa de Gobierno porteño”.
El 18M estuvo presente en el búnker libertario. Desde allí transmitió en vivo y publicó historias en sus redes sociales. Su vida digital es el pilar de su perfil político, aunque también es activa en el recinto. En la página oficial de la Legislatura capitalina se consigna que presentó 67 proyectos como autora y firmó 86 como coautora.
Una de sus iniciativas más conocidas fue la de organizar el año pasado un acto “en homenaje y conmemoración a las víctimas del terrorismo”. Lo hizo un mes después de la visita de diputados a represores en la cárcel de Ezeiza, también organizada por un coterráneo suyo, el libertario Beltrán Benedit. Rebeca también fue la impulsora de declarar huésped de honor a Jesús Huerta de Soto, el economista español que admira el presidente y que visitó el país en abril.
Fleitas y Benedit son dos referentes entrerrianos ante la conducción nacional mileísta. En el territorio, quien comanda los designios libertarios es Roque. Aunque operan en línea con el mandato nacional, en las internas partidarias por la elección de autoridades en la provincia el padre de Rebeca enfrentó algunas listas departamentales promovidas por Benedit, con dispositivos en las ciudades que respondían al diputado nacional en lugar de al legislador provincial. Fleitas ganó en todos los casos.
Rebeca dejó Paraná en 2016 para mudarse a Buenos Aires. Llegó con un título de Comunicadora Social y locutora y con experiencia en medios. Conoció al presidente en 2020, cuando todavía era un panelista de televisión y ella lo admiraba como espectadora. Se acercó entonces al Partido Libertario y empezó a militar. Su activa presencia hizo que terminara siendo jefa de la campaña publicitaria en las elecciones que depositó a ambos un año después en un rol legislativo en Buenos Aires.
Cuatro años después, desde la capital, Rebeca se siente parte del logro que LLA consiguió en esta provincia. Hace algunos días, cuando la Justicia otorgó la personería jurídica definitiva al partido, publicó en sus redes sociales un video en el que saludaba la novedad y mostraba unas palabras grabadas para la ocasión de Martín Menem. “Les mando un gran abrazo a toda La Libertad Avanza de punta a punta, a todos los que hicieron que esto sea una realidad”, dijo el presidente de la Cámara de Diputados.
A la distancia, está al tanto de la cotidianeidad del partido en la provincia y conoce la estrategia política y el armado, aunque asegura que la gestión local está íntegramente a cargo de su padre. “Se respeta la autonomía, no hay otra voz que pueda tener más autoridad que la del presidente del partido”, le dijo a Letra P.
Fleitas no descarta una futura candidatura en Entre Ríos, aunque la deja enteramente supeditada a lo que la conducción nacional le marque como destino. “Hoy mi objetivo está en la Legislatura, pero en el futuro voy a estar donde el presidente me necesite”, repite.
Su perfil de mujer joven y alineada con la agenda antiwoke y antifeminista que promueve la usina cultural del Gobierno la posiciona como un nombre que deambula entre los proyectos posibles. En la militancia provincial la miran de reojo por su posición de privilegio en el acceso a la información. Esa línea directa le valió ciertas ventajas cuando distintas tribus disputaban el amor de Karina y Lule para quedarse con el sello libertario. Ella sabía movimientos de antemano y se los compartía a Roque, que fue el triunfador en esa batalla.
De aquel “Che pá, armemos el partido en Entre Ríos” a hoy, la dupla Fleitas se sostiene entre internas que no cesan, porque todavía duran las esquirlas del armado salvaje de 2023. En ese río de personajes, la legisladora se mueve como ordenadora del caos por ser parte indiscutida de las huestes originarias del mileísmo.