Kicillof confirmó a última hora del jueves. Quintela pega el faltazo, pero manda a su número dos. No habrá pacto fiscal sin ley ómnibus, el mantra de Milei.
La administración de Javier Milei cursó la invitación a todos los gobernadores, sin excepción, a la reunión en la Casa Rosada para rediscutir la ley ómnibus y el paquete fiscal, con el objetivo de tratar ambas cuestiones de manera simultánea, a modo de prólogo del Pacto de Mayo: todas las provincias confirmaron su asistencia a través de su gobermador o de quien ocupe la vicegobernación.
Hubo cuatro que respondieron a última hora del jueves el mail con la invitación del Ministerio del Interior, que comanda Guillermo Francos. Uno de ellos, por caso, fue Axel Kicillof (Buenos Aires), que Letra P adelantó que estaba preparando su visita a Balcarce 50 este viernes, donde llevará bajo el brazo su contra-Pacto de Mayo.
Distinto es el caso del riojano Ricardo Quintela. Mientras el bonaerense había ironizado con un "arranquen nomás si no llegamos", el riojano descartó de plano firmar el Pacto de Mayo, al que calificó de "copia del Consenso de Washington, un fracaso absoluto". Tenía todos los números para no ir y así será: irá la vicegobernadora Teresita Madera.
Sergio Ziliotto (La Pampa) y Claudio Vidal (Santa Cruz) también confirmaron asistencia tarde. El primero no dudó en criticar la convocatoria abiertamente, pero este jueves compartió escenario con sus pares patagónicos en Puerto Madryn y habrían tomado la decisión de ir como bloque regional.
Alfredo Cornejo (Mendoza) enviará a sus vicegobernadora, porque se encuentra en Canadá, donde junto a su par sanjuanino Marcelo Orrego participaron de la feria Prospectors & Developers Association of Canada (PDAC). El segundo, creen en la Casa Rosada, llegaría con los vuelos y le reservaron una silla en la mesa.
Quien también enviará a su vice es Gildo Insfrán (Formosa), pero por razones distintas. Se estima que el peronista enviará a Eber Solís para desmarcarse un poco de la convocatoria libertaria, sobre todo después de las duras definiciones que lanzó en campaña contra Milei.
Hasta ahora, entonces confirmaron su presencia nueve de los diez gobernadores de Juntos por el Cambio: Orrego, Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ignacio Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Jorge Macri (CABA), Leandro Zdero (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy), Gustavo Valdés (Corrientes) y Claudio Poggi (San Luis). También respondieron afirmativamente Martín Llaryora (Córdoba), Gustavo Sáenz (Salta), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Alberto Weretilneck (Río Negro), Raúl Jalil (Catamarca), Rolando Figueroa (Neuquén), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Hugo Passalacqua (Misiones).
Si bien en la Casa Rosada aseguran que están dispuestos a escuchar los reclamos y agendas de las provincias, remarcan que la orden del Presidente es ofrecerles a los invitados un paquete fiscal a su medida, que se supone llevará algo de alivio económico a sus provincias, pero sólo a cambio que presten los votos de sus legisladores y legisladoras para aprobar los pilares del proyecto de ley ómnibus, que quedó cajoneado. Todavía no está cerrado si será un texto o varios que revivan la llamada Ley Bases.
"No podemos aprobar el pacto fiscal si el Gobierno no tiene las herramientas que necesita para manejar la crisis", remarcó una fuente del oficialismo que está al tanto de la organización de la cumbre de este viernes, que se llevará adelante a las 15.00 en el Salón Eva Perón de la sede de gobierno.
De esta forma, el oficialismo puso algunas condiciones, el lugar y el horario para comenzar a negociar, después de dos semanas de tensión en una virtual guerra de libertarios y federales. En un principio se informó que sería una sola reunión, luego que los gobernadores se repartirían en tandas y finalmente se volvió a la versión original con la idea de sacar de ahí una gran fotografía política en la previa del Pacto del 25 de Mayo. De todos modos, aclaran en la Casa Rosada, el de este viernes sería el primer encuentro de otros por venir.
No está definida la presencia del principal convocante, Milei. En la previa sólo están confirmados para sentarse en la mesa por el lado del oficialismo: Francos; el jefe de Gabinete, Nicolás Posse; y parte del equipo económico de Toto Caputo, ausente porque se encuentra de viaje en el exterior. Con estas tres áreas de la gestión presente en un mismo salón con los gobernadores, se estima que se evitarán los desencuentros internos habituales entre los ministerios, y se avanzará de manera más fluida en el ida y vuelta con las provincias.
Uno de los puntos en materia fiscal que el oficialismo le ofrecerá a los gobernadores es retrotraer Ganancias. En principio, se estima que la restitución del tributo quedará para salarios por encima de los $1,7 millones de pesos mensuales, después de la eliminación de la cuarta categoría impulsada por el entonces ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa. También, analizan en Gobierno poner el impuesto retroactivo a enero.
Rediscutir Ganancias era una necesidad de numerosas provincias, que se hacían de sus giros, al igual que reforzar algunos fondos discrecionales, como subsidios al transporte con el objetivo de compensar parte de los recortes que ordenó la Nación. Una suerte de "negociación" que ahora volvería a estar sobre la mesa. "No vamos a clausurar ningún tema y ningún pedido, pero sí vamos a ser claros en que no hay plata, y que el déficit cero y el superávit que buscamos es innegociable", sostienen en Balcarce 50.