La interna del PRO de Mendoza escala. El clima de enfrentamiento interno se profundizó este viernes con el movimiento con el que el sector que responde a la vicegobernadora del radical Alfredo Cornejo, Hebe Casado, intenta dejar fuera de carrera en la puja partidaria al senador provincial Gabriel Pradines, que integra el espacio de Omar de Marchi.
La fecha pactada para la interna es el 2 de junio, pero nada asegura que los plazos se terminen cumpliendo tal como estaban acordados. Luego de la intervención en las últimas semanas de las autoridades nacionales amarillas y de la Justicia Federal de Mendoza, la Junta Electoral provincial volvió a dar de baja la lista de Propuesta Federal referenciada en el demarchismo.
En la lista Amarilla de Casado sostienen que los avales presentados por Pradines no son válidos e incluso echan mano a una pericia caligráfica, que según el demarchismo demuestra la "manipulación" que el espacio de la vice ejerce sobre el proceso. "Las pericias se tienen que hacer sobre las originales. ¿De dónde sacaron la lista con los avales? ¿Cuándo se llevaron todos los papeles?", aducen y anticipan que volverán a pedir la intervención de las autoridades nacionales.
La batalla en el PRO
Los ánimos están caldeados desde antes de ponerle fecha a la contienda. Mientras había quienes imaginaban el fin de la intervención como una buena oportunidad para acercar posiciones, otro sector estaba decidido a dar a la batalla que quedó postergada luego de la interna que dividió al partido en la elección provincial.
Omar De Macrhi y Gabriel Pradines.png
Omar De Marchi y Gabriel Pradines.
La orden de la cúpula nacional favoreció a los últimos. Como el propio Mauricio Macri lo ha repetido en reiteradas oportunidades, la definición es competir, aunque él logró esquivar esa instancia cuando se quedó con la presidencia del PRO. En Mendoza, esa idea no parece haber quedado del todo clara.
Con el proceso en marcha, las impugnaciones empezaron a llover sobre la junta electoral provincial desde ambos sectores. Algunas, más de forma, advertían sobre la conformación de las listas, antecedentes de postulantes o la garantía de los cupos establecidos por la ley. Otras fueron a lo profundo y cuestionaron la legitimidad de los avales, buscaron bajar candidaturas e incluso retomaron las viejas acusaciones por las posiciones asumidas en la elección provincial.
La semana pasada la junta electoral del PRO mendocino, con mayoría afín a Casado, bajó la lista de Pradines. El senador acudió a la junta partidaria nacional, que pidió rever la decisión, pero el equipo de la vicegobernadora redobló la apuesta y elevó su presentación al Juzgado Federal 1 de Mendoza, que ratificó la elección habilitando a las dos listas.
El clima no cambia en Mendoza
Cuando todo parecía que las decisiones terminarían de oficializarse este fin de semana, la tensión se adueñó de la reunión del viernes. La junta volvió a impugnar la lista de Pradines. El senador provincial entiende que no tiene que ver con cuestiones legales, sino con una estricta voluntad política. Para Nuria Olivera, cabeza de la junta mendocina, directamente “hay gente que aún no sabe interpretar textos”.
Embed - https://publish.twitter.com/oembed?url=https://twitter.com/nuriaolive2/status/1789095361170002343&partner=&hide_thread=false
Olivera, Sergio Miranda y Lucas Faure son las partes de la junta mendocina que responden a la vicegobernadora, mientras que la lista Propuesta Federal reconoce como propios a Belén Castillo y Darío Tello.
En la reunión del viernes se volvió a poner sobre la mesa el camino de impugnaciones y acusaciones de ambos lados que reeditaron los enfrentamientos, razón por la cual difícilmente se haya tratado del último cruce que ahora volverá a elevarse a las órbitas nacionales: el sector de Pradines confirmó que volverá a apelar la decisión.
Alfredo Cornejo vs. Omar de Marchi, la pelea de fondo
Más allá de los tironeos actuales, el objetivo de la interna es normalizar el partido luego de la ruptura que tuvo su punto más álgido cuando De Marchi propuso que el sello amarillo abandonara Juntos por el Cambio para integrar el armado con el que enfrentó a Cornejo en las elecciones de 2023. El PRO se dividió y el partido fue intervenido.
Desde entonces, el minuto a minuto de la interna amarilla tiene una estrecha relación con el devenir de la relación entre los dos líderes territoriales que nunca pudieron recomponer su relación. De Marchi es funcionario nacional y forma parte de la dirigencia que entiende que el partido debe avanzar hacia una alianza estratégica con La Libertad Avanza.
Cornejo se mueve con mayor equidistancia de las posturas tajantes y juega con mayor libertad según le conviene a su gestión y su proyecto político. No tiene reelección y es de los que siempre se anota entre los presidenciables del radicalismo. Por estas horas, es un un proyecto que se ve lejano, no sólo por la falta de consensos dentro de su partido, sino porque transita una etapa en la que busca presentarse como uno de los garantes de la gobernabilidad de Javier Milei, que sí tiene reelección y ya coquetea con extender su estadía en la política nacional después de 2027.
Alfredo Cornejo y Hebe Casado.png
Alfredo Cornejo y Hebe Casado.
Para ambos proyectos resulta fundamental contar con la conducción del partido amarillo mendocino, que actualmente tiene 18 mil personas afiliadas en una de las provincias que siempre respondieron en tiempos electorales. La interna también tendrá impacto directo en la disputa provincial de 2027. Una victoria de Pradines encumbraría la figura de De Marchi, que podría buscar una nueva oportunidad de llegar a la gobernación. Un triunfo de Casado acorazaría la alianza amarilla-radical en el proyecto de Cambia Mendoza.