El gobernador de Córdoba presentó el nuevo penal para 1.000 internos de alto riesgo, que contará con tecnología avanzada. El pedido al gobierno de Javier Milei.
Martín Llaryora refuerza las medidas de seguridad y amplía los cupos para presos peligrosos de Córdoba.
El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, presentó la nueva cárcel de máxima seguridad que se construye en el Complejo Carcelario N° 1 Reverendo Padre Luchesse, en Bouwer. Este penal albergará a 1.000 detenidos de alto perfil de riesgo y será custodiado por un Grupo Táctico Especial.
El Centro de Máxima Seguridad (CEMAX) tendrá 448 celdas y contará con un estricto sistema de vigilancia. La obra, que ya presenta un 80% de avance, tiene una inversión de $109.000 millones y abarca 27.000 m² en un predio de 118.200 m².
Para garantizar la seguridad, el penal tendrá cámaras con inteligencia artificial, escáneres de máxima seguridad, inhibidores de telefonía móvil y un sistema de radar perimetral para detectar movimientos sospechosos. Además, se implementará el uso de uniformes para los internos y un régimen de visitas restringido a cada 15 días.
“Nada se puede hacer para que viva en paz una comunidad sin garantizar seguridad. Por eso nuestro compromiso tiene que ser que el miedo lo tengan los delincuentes y no la gente. Y que los que estén tras las rejas sean los delincuentes y no nuestros vecinos”, sostuvo el gobernador.
Junto con el CEMAX, el gobierno de Córdoba anunció la construcción de una nueva Unidad de Contención de Aprehendidos (UCA) en Bouwer, con capacidad para 500 personas.
La inversión para esta unidad será de $15.000 millones y contará con ingresos, egresos y perímetros independientes del resto de los módulos del complejo carcelario.
El mandatario reclamó al gobierno nacional la construcción de cárceles federales en Córdoba, ya que actualmente no existen espacios específicos para los presos con condenas federales en la provincia.
Asimismo, presentó un proyecto de ley para que el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) reubique las antenas de telefonía móvil cercanas al penal de Bouwer, permitiendo así un bloqueo más efectivo de señales dentro del complejo.
“El miedo lo tienen que tener los delincuentes, no la gente. Los que deben estar tras las rejas son ellos, no nuestros vecinos”, afirmó Llaryora durante la presentación.
“La situación nacional de aumento de la pobreza y deterioro de la clase media, nos lleva a reforzar la seguridad para garantizar la libertad y la vida de todos los vecinos que actúan honradamente y que quieren trabajar y progresar en una comunidad organizada”, enmarcó el anuncio el gobernador.
La construcción del CEMAX y la UCA forma parte del plan integral de seguridad que lleva adelante el Gobierno de Córdoba, que incluye la incorporación de nuevas tecnologías, fuerzas de prevención y fiscalías antinarcotráfico.