La Pampa tiene decidido afirmarse en su trinchera: frente a la ofensiva de la gestión de Javier Milei para barajar y dar de nuevo con la ley ómnibus XS, el gobierno del peronista Sergio Ziliotto interpreta que el encuentro con gobernadores fue nada más que una foto y que no hay nada nuevo bajo el sol.
Sin medias tintas y, además, en el camino de un acuerdo con otros gobernadores peronistas, el pampeano considera que la propuesta de La Libertad Avanza es “el mismo perro con el mismo collar”. Ni siquiera, como dice el refrán, se trata de un perro diferente.
Esa fue la metáfora que usó este lunes el diputado Ariel Rauschenberger, parado con firmeza en la vereda opositora. Con esa tendencia, el mentado Pacto de Mayo posiciona a La Pampa en el mismo club del bonaerense Axel Kicillof, quien avisó: “si el pacto es para la foto y no llegamos, arranquen sin nosotros nomás”.
La Pampa: primero lo primero
Con alguna variación menor en los tonos, es la postura general de la liga compañera que también integran el riojano Ricardo Quintela, el formoseño Gildo Insfrán, el santiagueño Gerardo Zamora y el radical Gustavo Melella de Tierra del Fuego.
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Después del encuentro con el ministro del Interior, Guillermo Francos, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, Ziliotto hizo el mismo planteo que en la previa: para que haya un Pacto de Mayo, antes debe haber respeto por la Constitución. La provincia cree que, en este caso, el orden de los factores altera el producto.
Además, los gobernadores exigen que exista una comunicación coherente, como corresponde a un vínculo institucional: en La Pampa están azorados del modo en que el gobierno nacional corta los canales de diálogo, no atiende los teléfonos o ningunea temas y áreas. El encuentro previo en el que fueron citados los ministros de Economía fue un ejemplo en ese sentido: otra foto, puro protocolo y una difusa amenaza de auditar las cajas previsionales.
Javier Milei insiste pero no aprende
En la reunión de la Casa Rosada existió la advertencia federal de que un tuit de Milei no arruinara las posibles negociaciones, pero en rigor no hubo tales acuerdos ni consensos, sino más bien presentaciones formales y la confesión nacional de que aspiraban a una ley ómnibus reducida, de la que sólo se difundieron sus “títulos” y no su contenido completo.
El análisis del gobierno pampeano es que el Ejecutivo no aprende: la “nueva” ley toma como base el dictamen anterior, otra vez insiste con privatizaciones y facultades delegadas. El mismo perro con el mismo collar, en la metáfora del peronismo pampeano, que luce dispuesto a ladrar y a morder.
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Ignacio Torres junto sus pares Rolando Figueroa, Sergio Ziliotto, Alberto Weretilneck y, vía Zoom, Claudio Vidal. La Patagonia unida en su reclamo.
A eso se suma que la zanahoria que ofrece Milei no convence a nadie: la propuesta de una repartija reponiendo el Impuesto a las Ganancias es rechazada por al menos la mitad de los gobernadores y hasta un relativo aliado de la Nación como el gobernador chubutense del PRO Ignacio Torres ya abrió el paraguas diciendo que “no va a salir”. Los que avisan, no traicionan. Esa postura es especialmente sostenida por los jefes territoriales en zonas petroleras, así que el scrum patagónico puede tener algunas disidencias en ciertas posturas, pero no en ese punto.
La motosierra poda en La Pampa
Mientras tanto, el bolsillo pampeano sufre la motosierra. Al 1° de marzo de este año, según las cuentas de Ziliotto y su ministro de Economía, Guido Bisterfeld, La Pampa dejó de recibir de la Nación unos $20.000 millones que contaba para afrontar programas y servicios. Se incluyen unos $4.000 millones que no llegaron para cubrir el déficit de la caja previsional, previsto por ley.
La Pampa afrontó con su fondo anticíclico parte de esos recortes nacionales: el fondo de incentivo docente, la obra pública fundamental. Sin embargo, todo no se puede: el recorte del subsidio al transporte es un agujero negro que se siente en los bolsillos populares.
En Santa Rosa, la capital de la provincia gobernada por el peronista Luciano di Nápoli, la empresa de transporte municipal tuvo que llevar su boleto de $190 a $715. Se mantiene la gratuidad para estudiantes. También la provincia firmó un convenio en el mismo sentido para beneficio de estudiantes de la Universidad Nacional de La Pampa, cuyo rector es Oscar Alpa, exsecretario de Políticas Universitarias.
El "aporte solidario" que Sergio Ziliotto saca de la galera
Ziliotto además quiere imponer en la provincia un “aporte solidario obligatorio”, que afectaría por única vez, durante seis meses, a los sectores más favorecidos económicamente: se trata de un incremento a los Ingresos Brutos que pagan los bancos y un aumento para quienes tienen cinco propiedades urbanas o vehículos de alta gama que superan una valuación fiscal de $40 millones, exceptuando maquinaria rural. También cae sobre los salarios de funcionarios de los tres poderes y sueltos más altos de la administración pública.
La oposición pampeana ya se paró de manos ante esa propuesta: la interpretan como “un impuesto más”. El más activo en el rechazo es el PRO, aunque a nivel nacional es la misma fuerza que en alianza con Miei bancaría el regreso de Ganancias. La duda es si los partidos no peronistas harán montonera de ausencia para evitar que haya cuórum cuando se trate esa iniciativa.