La presidenta del PS Mónica Fein y el gobernador cordobés Juan Schiaretti.
Mientras sigue de cerca los avances de su armado nacional, Schiaretti continúa conjugando gestión y campaña en Córdoba.
En medio del cierre de la campaña en la provincia de Córdoba de cara a los comicios de este domingo, el comando central de Juan Schiaretti se ubica en la Ciudad de Buenos Aires. Con los teléfonos que lo mantienen conectado 24/7 con sus principales laderos en el armado nacional, ultima detalles para la presentación de candidaturas que tiene un plazo fatal el próximo sábado a la medianoche.
El principal desafío para Hacemos por Nuestro País, el frente que llevará al gobernador cordobés como precandidato a la Presidencia, está puesto en el armado en la mayor cantidad de provincias y en alcanzar los consensos necesarios para definir la fórmula. Para eso, avanza asegurando listas con nombres de peso en los principales distritos del país. Con la convicción de tener una base sólida en la provincia que gobierna de forma ininterrumpida desde el año 2015, recluta referentes de renombre en Buenos Aires y Santa Fe, mientras busca replicar esos armados en la Ciudad de Buenos Aires, Entre Ríos y Mendoza. Con ese proceso en marcha, su entorno confía en que la boleta de Schiaretti tendrá postulantes al Congreso desde Ushuaia hasta La Quiaca.
Desde que se oficializó la alianza, el chivilcoyano Florencio Randazzo suena como uno de los nombres más fuertes para ocupar ese espacio. A la inversa de lo que sucede con la mayoría de las fuerzas que se presentan a la contienda electoral, encabezadas por referencias porteñas y bonaerenses que buscan vices con anclaje territorial en las provincias, el cordobés explora alguna opción que fortalezca su presencia en el distrito bonaerense, el de mayor peso electoral del país.
Hasta el momento, Schiaretti no tendrá candidato a gobernador en Buenos Aires. Su espacio no fue presentado en la Justicia Electoral bonaerense y, salvo que algún partido en soledad presente un candidato que se referencie en el cordobés, no habrá nadie de Hacemos por Nuestro País que enfrente a Axel Kicillof ni divida el voto opositor.
Con todo en veremos, es posible que el armado nacional schiarettista encuentre algunas conexiones con la campaña de JxC en la provincia, más allá del factor antikirchnerista. Así como el Partido Tercera Posición, de la aliada legislativa Graciela Camaño, forma parte de la estructura cambiemista bonaerense, también lo hacen algunos aliados locales del gobernador, como el GEN y el Partido Socialista.
Por esa razón, no es descabellado pensar que la lista a Diputados que encabezará Hilda “Chiche” Duhalde y con una posible presencia de Diego Bossio en el segundo casillero puede llegar a incluir referencias de esas fuerzas políticas que, a nivel provincial, jugarán con algunos de los bandos en pugna de JxC. Por la cercanía ya expuesta, la lógica indica un acercamiento con el espacio de Diego Santilli, el candidato a gobernador del larretismo que, entre otras cosas, tiene una muy buena relación con Martín Llaryora, el intendente que quiere ser el gobernador que continúe la gestión de Schiaretti en Córdoba.
También hay una particular expectativa por el desbande del peronismo bonaerense no kicillofista, que pretendía recuperar algo de espacio subiéndose a las necesidades de Daniel Scioli y Victoria Tolosa Paz, las figuras del oficialismo que insisten con competir en las primarias a pesar de la negativa cada vez más férrea del kirchnerismo y el massismo.
El entorno cordobesista asegura que presentará postulantes en casi todo el país. En esa garantía, el socialismo cumple un rol fundamental y le garantiza al peronista del centro nombres para engordar las listas en San Juan, Corrientes, Catamarca y La Pampa. También se descuenta la presencia en las listas de Córdoba y Santa Fe, el lugar en el que el Partido Socialista, apoyado en la rama que históricamente se identificó con Miguel Lifschitz y y que hoy sostiene la conducción nacional de Mónica Fein, pica en punta para encabezar la nómina de aspirantes al Congreso. Allí, el nombre que aparece con más chances de protagonizar la campaña es el del exsubsecretario de Políticas de Diversidad Sexual del gobierno santafesino, Esteban Paulon.
Al igual que Schiaretti, el socialismo trabaja contrarreloj para lograr acuerdos con representación partidaria que garanticen el armado de HxNP en otros distritos del país.
En el entorno del cordobesismo descuentan la presencia puntana en las listas de Schiaretti. Alberto Rodríguez Saá fue el único gobernador que, públicamente, dio el visto bueno para un armado antigrieta impulsado por el peronismo no kirchnerista a comienzos de 2023 y, desde entonces, se dedicó a no sacar los pies de ninguno de los dos platos. De hecho, aportó a la ruptura del bloque oficialista en el Senado el día que María Eugenia Catalfamo se sumó al armado de la bancada Unidad Federal, que hoy comparte con Alejandra Vigo. La puntana fue candidata a vicegobernadora por el oficialismo en su provincia y perdió. Termina su mandato en la Cámara alta el 10 de diciembre.
Como ya contó Letra P, el interbloque del que participa el cordobesismo en la Cámara baja pone en juego cuatro bancas que aspiran retener en las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. Con el empuje del gobernador como cabeza de boleta, esperan que esa representación crezca al menos en uno o dos escaños. Con la tracción provincial de su armado, el schiarettismo cree que puede multiplicar las bancas que pone en juego y convertirse en un actor decisivo para el Congreso que viene.
El hermetismo de la hora es propio de todos los armados que tienen al gobernador de Córdoba como principal referencia. Apenas si Schiaretti se abre públicamente cuando decide anunciar algo o lanzar un comentario específicamente direccionado para tal o cual fin. En una provincia en la que siempre se enfrentó a una oposición vociferante, ese estilo le sirvió mucho. Por eso siempre lo cuidó al detalle y no parece el momento oportuno para cambiar. El clima político en general y la estrategia electoral en particular así lo indican.
"Estamos trabajando", repiten en el entorno del cordobés, mientras aseguran que el armado alcanzará a todas las provincias del país. En un escenario en el que las fórmulas presidenciales se confirman a cuentagotas, piden paciencia y guardan cautela.