De la mano del camporista Julián Álvarez, el peronismo le arrebató a Juntos por el Cambio (JxC) el distrito de Lanús. Con el 78% de las mesas escrutadas, se imponía con comodidad al macrista Diego Kravetz: 44,55% para el ganador y 34,7% para el alfil de Néstor Grindetti.
Con estos resultados, el peronismo recupera este distrito de la Tercera sección electoral después de dos periodos consecutivos de gobiernos de JxC, que llegó al gobierno por primera vez en 2015 de la mano de Grindetti. Con anterioridad, el Partido Justicialista había administrado Lanús desde el regreso de la democracia y hasta 2007 a través del histórico barón Manuel Quinidimil y desde esa fecha y hasta 2015, a través de Darío Díaz Pérez.
El triunfo de Álvarez significa un respaldo territorial relevante en el camino que deberá emprender Sergio Massa de cara al ballotage, por la preponderancia que tiene en el conurbano sur, junto con Quilmes, Avellaneda y Lomas de Zamora, y otros distritos densamente poblados. En paralelo, el resultado se traduce de manera directa en un duro golpe para JxC, que pierde el único distrito que gobernaba en esta región.