“Nunca es tarde si la dicha es buena”, le señaló a Letra P un diputado del Frente de Todos para opinar sobre la mesa electoral que mencionó Alberto Fernández este domingo. El legislador se amparó en una frase del escritor español Miguel de Unamuno para no perder la elegancia. Al igual que sus pares de las demás tribus internas del panperonismo, le prodiga un futuro venturoso a la mesa de convivencia 2023, pero prefiere que no se exponga ni desgaste a la única instancia del FdT que “realmente funciona”.
Dentro de las 118 voluntades que integran al bloque del Frente de Todos están representadas casi todos los espacios internos del panperonismo. Hasta los socios más chicos tienen representación parlamentaria dentro de la bancada que conduce Germán Martínez. El rosarino lidera desde hace un año, cuando el diputado nacional Máximo Kirchner decidió renunciar a la presidencia del bloque en rechazo a la renegociación con el FMI que estaba llevando adelante Fernández y el entonces ministro de Economía Martín Guzmán.
En algunos referentes del bloque llamó la atención que, a priori, no haya una convocatoria formal a algunos legisladores. Recuerdan el antecedente más cercano de reconstitución de la unidad del peronismo y repasan la “mesa de acción política” que puso en marcha el PJ en 2018. Por entonces era presidido por el sanjuanino José Luis Gioja. Al igual que ahora, el exgobernador ocupaba una banca. En esa oportunidad puso en marcha una mesa que tuvo al peronismo como columna vertebral, pero reunió a 11 partidos y agrupaciones que fueron el germen fundacional del FdT.
Los integrantes que se animaron a dialogar con Letra P, reflejaron que nadie tiene interés en volver a vivir los momentos críticos que transitaron entre el naufragio del Presupuesto 2022, durante diciembre de 2021 y la decisión que Máximo adoptó un mes después, cuando dejó la conducción del bloque.
El paragolpe más eficaz serán las representaciones orgánicas de cada uno de los partidos y espacios que integran el FdT. “Todos los diputados y las diputadas tienen su expresión en algún sector interno del frente”, atajó otro legislador para justificar que la rosca electoral corra por cuenta de las conducciones orgánicas y pase lejos del Congreso.
“Entiendo que un cosa es el dispositivo electoral del Frente y otro es nuestro rol político parlamentario. Lo importante es que estén todos los actores internos del FdT”, contestó a LetraP una autoridad del cuerpo para ratificar la posición de sus pares. En su mensaje el Presidente habló de un “ámbito de debate” que “sirva para abrir la convocatoria a los sectores sociales, de la producción y del trabajo que acompañan a nuestra coalición de Gobierno con los que compartimos un mismo proyecto de país”. Sin embargo, en los pasillos de la Cámara baja no hablan de la “mesa”, sino “de un dispositivo electoral” que servirá para canalizar muchos de los debates internos que retumban en el bloque y que deben canalizarse en otro lado.
“El Presidente fue muy claro con el dispositivo electoral y la cuestión legislativa va por otra vía”, resumió un importante escudero del oficialismo que está enfrascado en el trabajo de la comisión de Juicio Político que funciona hace dos semanas para tramitar los pedidos de destitución que impulsa el oficialismo contra los miembros de la Corte Suprema. "En ese proceso está la mayor muestra de unidad y la demostración de que el frente funciona en Diputados", resaltó el diputado, aunque prometió no hablar de la mesa electoral hasta que sea formalmente convocada. "Hasta ahora no hubo invitaciones formales y un sector del kircherismo quiere discutir todo ahí, ¿se concretará?", se preguntó.
En otras latitudes del espacio panperonista reconocen algunas preocupaciones por la convocatoria. Fernández habló de reunir a todos los sectores. A "gobernadores y gobernadoras". También a "intendentes e intendentas". Deberán "deberán definir el núcleo dirigencial que represente a la fuerza territorial del Frente de Todos". En esa mención no aparecen los movimientos sociales. Cuentan con representación parlamentaria pero sus integrantes no quitan el foco de las prioridades que escribió Fernández. Los intendentes son sus principales adversarios en cada uno de los territorios donde buscan incrementar una presencia en las urnas que, por ejemplo, les permitió llegar a Diputados.