Luego de los anuncios con los que el oficialismo busca generar la entrada de divisas en las arcas del Banco Central de la República Argentina (BCRA), el secretario de Industria y Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren, reconoció que “el Gobierno está desesperado por los dólares” y adelantó que “se está estudiando” la posibilidad de permitir la importación de productos industriales a través de fondos norteamericanos no declarados.
“Lo estudiamos”, contestó al ser consultado en AM750 sobre la posibilidad de habilitar un blanqueo de capitales para el sector industrial y ejemplificó: “Estamos desesperados por los dólares. Por eso nuestro plan de estabilización plantea generarlos y mantener el poder adquisitivo del salario".
El funcionario que responde al ministro de Economía, Sergio Massa, denunció que algunos sectores de la industria buscaron “forjar una devaluación y generar incertidumbre” durante la última subida del dólar, pero destacó que, a raíz de las últimas medidas, “las dudas se despejaron”. “Los industriales pedían estabilidad y para alcanzarla se necesita que todos pongan. Para alcanzarlo, si vos no me ayudás con los precios, no podemos tener estabilidad. Buscar la estabilidad es responsabilidad de todos, también de la oposición”, agregó.
Además, en declaraciones a Radio Provincia, de Mendiguren resaltó la reunión que mantuvo con el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, en la que trataron -detalló- la actualidad de los precios y la inflación que sufre la Argentina. "Hay empresas que reciben atenciones especiales, como sucedió en la pandemia", recordó, por lo que les exigió que “en estos momentos difíciles hay que hacer los aportes que tienen que ver con un comportamiento serio en cuanto a precios".
"Massa me informa todos los días cómo funciona cada sector, los precios, los costos. Nos falta muchísimo, la inflación es uno de los temas más preocupantes, eso no quiere decir que nos sacamos el lazo de encima, pero hay que decir que hay una inflación internacional muy fuerte”, profundizó y ejemplificó que “casi todos los países desarrollados tienen la inflación más alta desde la segunda Guerra Mundial".
"En eso tuvo que ver que en la crisis de la pandemia ninguno de estos países dejó caer el nivel de actividad, inyectó los pesos o dólares necesarios para que se mantenga el nivel de actividad; hoy tenemos las pymes vivas que no estarían vivas si no se hubieran tomado las medidas", completó.