Una plaza del clamor para apuntar contra el odio. La actriz Alejandra Darín fue la encargada de leer el comunicado con el que el oficialismo cerró la multitudinaria concentración que se llevó a cabo frente a la Casa Rosada en repudio al intento de asesinato que sufrió Cristina Fernández de Kirchner. A través de la lectura de un documento, titulado "La paz social es una responsabilidad colectiva", organizaciones del FdT sostuvieron que “no hay manera de relativizar ni minimizar” el intento de magnicidio, al tiempo que apuntó contra “un sector minúsculo de la dirigencia política y de los medios partidarios” que “vienen repitiendo un discurso de odio”.
La lectura del mensaje en la Plaza de Mayo, con total sello de la vicepresidenta, apenas fue interrumpido por hits clásicos del cancionero K como “El que no salta es de Clarín”, “Si la tocan a Cristina, que quilombo se va a armar” y "Cristina Presidenta". En el medio, leído por Darín, el comnunicado llamó a “la unidad nacional”, pero aclaró que no será “a cualquier precio”. “El odio afuera”, exigió.
“La convivencia democrática debe prevalecer sobre cualquier desacuerdo político”, leyó la actriz, y advirtió que si la sociedad argentina no quiere que “la intolerancia y la violencia política arrasen con el consenso democrático” construido desde 1983, se debe “contextualizar” el intento de magnicidio en un momento político marcado por la profundización de la polarización y el extremismo adoptado por algunos sectores de la oposición.
“Todos hemos visto movilizaciones donde se pasearon bolsas mortuorias, ataúdes o guillotinas. No es inocente ni gratuita la legitimación de discursos extremos de llamados a la agresión, de planteos que niegan legitimidad política del adversario”, recordó el texto, en referencia a actos del antikirchenrismo, y profundizó: “Nadie es individualmente responsable por las acciones de otros, pero quienes cedieron minutos a los discursos de odio deberán reflexionar sobre cómo han colaborado para que lleguemos a esta situación”.
Desde un escenario al que no se subió el presidente Alberto Fernández pero sí distintas personalidades del gabinete nacional, como los ministros de Economía, Sergio Massa, y de Defensa, Jorge Taiana, o su par de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero, junto a figuras defensoras de derechos humanos y autoridades provinciales, la actriz leyó que “la vida democrática es incompatible con el accionar de minorías violentas que pretenden llevar de las narices al resto de la sociedad u obligar a determinada dirigencia a tomar posiciones cada vez más sectarias” y que “el daño que producen las acciones y las palabras violentas” sobre la juventud nacional “es una condena para el futuro de la argentina”.
“No hay manera de relativizar ni minimizar un intento de magnicidio. La solidaridad y el repudio de toda América Latina muestran que el mundo entiende cabalmente la gravedad de lo ocurrido”, ahondó el mensaje. “Nadie que defienda la República puede permanecer en silencio o anteponer sus diferencias ideológicas al repudio unánime que esta acción depara”, completó.