ROSARIO (Corresponsalía Santa Fe) Tras la aprobación de uno de los proyectos más importantes del año legislativo, la ordenanza antilavado, el Concejo Municipal bajó la intensidad de la actividad y se abocará en las próximas semanas al trabajo en comisiones. La próxima sesión será el jueves primero de septiembre.
Los taxistas visitaron la comisión de Servicios Públicos y fueron la coartada perfecta para que el socialismo le pegue al gobierno de Omar Perotti, los cadetes hicieron lobby por un proyecto que los beneficia y la nocturnidad volvió a meterse en la agenda legislativa.
Representantes de las cámaras de taxis y remises de la ciudad visitaron esta semana el Palacio Vasallo para solicitar un aumento del 60% en la tarifa. Piden una recomposición para “la subsistencia” del servicio y argumentan que la inflación les comió el último aumento. De paso, aprovecharon la oportunidad para insistir con la inseguridad que sufren quienes manejan los vehículos y quejarse por la falta de presencia policial. La presidenta de la comisión de Servicios Públicos, la socialista Verónica Irizar, les pidió que esperarán al próximo estudio de costos y que se buscará “el menor impacto posible para que sea viable el sistema”. Además, le pasó la pelota al peronismo y sugirió que para tratar de temas de seguridad hablen con el concejal Lisandro Cavatorta (Todos Hacemos Rosario) para que los ayude a gestionar una reunión con el nuevo ministro de Seguridad de la provincia, Rubén Rimoldi.
La noche rosarina
La nocturnidad, tema pendiente en la agenda legislativa desde hace varios años, volvió a tomar relevancia esta semana. La comisión de Producción se reunió con representantes de la Unión Gastronómica de Rosario, la Cámara de Hostels de Rosario y de la Asociación Rosarina de Guías de Turismo (Arguitur) para discutir problemáticas vinculadas a la ordenanza. Todos los bloques coinciden en que “quedó vieja” y en la necesidad de "trabajar en su actualización".
Ediles y edilas destacaron el hecho de que la ordenanza sea debatida en dicha comisión para poder orientarla a una perspectiva productiva y que no quede relegada solo a cuestiones de habilitación y controles. Piden además que el debate se dé de una manera segmentada y no “todo junto” como la última vez. Por lo pronto, el tema será tratado en Producción y Gobierno pero esperan abrir el juego para que la nueva normativa sea lo más abarcativa posible. Esto recién empieza y nadie se quiere quedar afuera de la discusión.
Lobby de los cadetes
Las agrupaciones de cadetes también fueron al Concejo esta semana. Quienes trabajan para aplicaciones, delivery o mensajería se hicieron presentes dentro y fuera del Palacio Vasallo para reclamar que avance la iniciativa de Cavatorta para crear el programa Motos Seguras y un registro de repartidores y repartidoras.
El expediente contempla, entre otras cosas, colocarle GPS a las motos, un botón de pánico y el registro de cadetes a través de un código QR para ahorrarse tiempo en los controles. De avanzar, el municipio sería el encargado de costear el programa. Mientras sus representantes exponían sus preocupaciones y sugerencias dentro del edificio, un grupo de motos se concentró en la calle para respaldar la iniciativa y meter presión.