La Justicia le dio la razón al reclamo de Marcelo Tinelli, presidente del club San Lorenzo en uso de licencia y hasta ahora mandamás de la Liga Profesional de Fútbol (LPF), al ordenar la intervención de la entidad que organiza el torneo de primera división y frenar la asunción de nuevas autoridades. La Sala B de la Cámara Civil dictaminó que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) deberá convocar a elecciones en un plazo no mayor de 90 días para designar a la mesa directiva y, mientras tanto, hacerse cargo del andar del campeonato. La medida se produjo luego de la impugnación formulada por el conductor de TV y empresario, quien denunció irregularidades en el acto eleccionario que ungió a la lista de unidad encabezada por el presidente de Argentinos Juniors, Cristian Malaspina.
De esta manera, la novela por el control y el manejo de la pasión popular más importante del país tiene un nuevo capítulo. Con este escenario, resulta favorecido Tinelli, el hombre de confianza del presidente Alberto Fernández en las cuestiones futboleras, quien busca postergar el mayor tiempo posible su salida del organismo luego de que 20 de los 28 clubes, con el aval del titular de AFA, Claudio Chiqui Tapia, consensuaran una lista de unidad alrededor de Malaspina para las elecciones que estaban previstas para este mes.
Con este fallo, Tapia deberá comandar el funcionamiento de la Liga durante los próximos tres meses y efectuar la convocatoria a elecciones para definir a las nuevas autoridades esquivando los fantasmas de los recordados comicios del 3 de diciembre de 2015, cuando el entonces representante del Bicho de La Paternal, Luis Segura, y el propio Tinelli empataron 38 a 38 en una jornada en la que solo votaron 75 dirigentes. Será una tarea que empezará a desarrollar en los próximos días, luego de que regrese de una gira internacional que lo llevó a Qatar, donde presenció el sorteo del campeonato mundial.
El fallo judicial de este miércoles dirime la disputa por el control del fútbol a favor de Tinelli, quien impugnó la candidatura de Malaspina por “graves irregularidades” en su presentación, a la que cuestionó por la falta de documentación respaldatoria y diversas anomalías. De todas maneras, en el fondo de la pelea hay un tironeo de poder más grande en la que participan el propio Presidente y Tapia, que en los últimos dos años logró revertir la tendencia y afianzó su poder en Viamonte 1366.
Como fue contando Letra P durante estos meses, la disputa es de larga data y comenzó a fines del año pasado, cuando distintos clubes de primera división iniciaron negociaciones para destronar al conductor de televisión de la LPF al acusarlo de "estar borrado" del día a día del fútbol. A raíz de las disputas internas, la oposición logró llamar a elecciones para destronarlo, pero las negociaciones desembocaron en un acuerdo multipartidario de unidad encabezado por Malaspina. De todas maneras, Tinelli impugnó ante la Justicia, que, finalmente, este miércoles falló a su favor.
