CÓRDOBA (Corresponsalía) Mientras las principales voces de la UCR provincial desestiman la existencia de cortocircuitos posteriores a la cumbre partidaria de Villa Giardino, las otras fuerzas que confluyen en el armado de la versión cordobesa de Juntos por el Cambio (JxC) miran con alivio el resultado oficial de las jornadas del pasado fin de semana. La postergación del lanzamiento de candidaturas, la ausencia de ungimientos oficiales y la declinación en el tono independentista del titular del partido, Gerardo Morales, todo es metabolizado como necesario para la salubridad del incipiente armado local, pese a las exigencias que algunos sectores ucerreístas sostienen desde diciembre pasado.
La continuidad de tales indefiniciones, entienden, avala el camino de consolidación de una estructura dotada de procesos internos, reglamentos y una plataforma compartida. Más importante aún, remarcan, evita el inicio de un desgastante proceso de confrontación entre postulantes. Recuerdan, aún con temor, lo ocurrido en las elecciones de 2019.
Con cuidado de no inmiscuirse en la interna rojiblanca, en JxC interpretan las conclusiones finales como un triunfo de la mesura ante la urgencia. Es decir, la conducción del partido, referenciada en Mario Negri, imponiéndose a la prisa manifestada en las declaraciones previas del gobernador jujeño y a las expectativas, derivadas en reclamos, de Rodrigo de Loredo.
“Quizás se esperaba una aclamación anticipada, pero finalmente el radicalismo no puso candidato. Eso es beneficioso para la estructuración de Juntos por el Cambio porque no se alientan desconfianzas previas. Porque si hay pelea, empieza el terrorismo un año antes. Hoy es otra la lógica, hay que construir para garantizar algo más importante”, analiza Oscar Agost Carreño, apoderado del PRO en la ciudad de Córdoba, en diálogo con Letra P.
“Que cada partido se junte y debata fortalece la democracia. Lo que no está bien es que se confunda la etapa agonal con la arquitectónica. No es el momento para proclamar candidatos. Antes tenemos que construir y lograr consensos. Esta es una alianza de siete partidos y hay mucho por hacer”, destaca a este medio Gregorio Hernández Maqueda, referente de la Coalición Cívica.
“Es una excelente noticia, porque la UCR ratifica que ha recuperado las ganas de ganar. Es lo mejor que nos podía pasar para fortalecer nuestra posición”, rubrica Luis Juez. Con mayor énfasis, el senador ubica entre los afectados al peronismo cordobés, al que prevé beneficiario, también promotor, de cualquier obstáculo que impida la unidad de la entente opositora. “A pesar de los terribles esfuerzos del PJ y sus aliados locales, primó el sentido común y las ganas de volver a ser protagonistas. Eso es muy bueno para todos. El peronismo sabe que enfrenta un fin de ciclo y ( Juan) Schiaretti operará con todo”, enfatiza el exintendente consultado por Letra P.
Juez ubica entre tales operaciones a las versiones sobre un acuerdo entre el gobernador cordobés y JxC que exceda las fronteras provinciales: “No hay ninguna chance”, afirma.
“Es con todos”
Las valoraciones de los socios también contemplan una dimensión temporal. Dado que Schiaretti aún no ha definido la fecha de los comicios para el año próximo, y tampoco si la elección provincial coincidirá con la de la capital, la postura mayoritaria pide mesura. Una definición demasiado prematura podría favorecer una erosión de los nombres elegidos.
“Falta un año como mínimo. La fecha de la votación puede ser entre abril y octubre. Sería una locura dejarse ganar por la ansiedad. Acá no hay nombres sagrados. Quienes se sientan candidatos, siguen siéndolo y pueden continuar con su trabajo de instalación. Lo importante es la transparencia del proceso y la consolidación institucional. La mesa cordobesa de Juntos por el Cambio se reunió ya ocho veces. ¿Cuántas veces se reunió la mesa de Hacemos por Córdoba?”, hilvana Hernández Maqueda.
“Nadie quiere discutir si hay nombres puestos de antemano. Nosotros tenemos que fortalecer al PRO, porque nuestro aporte es fundamental. El mismo Juez sabe que nos necesita, que solo no puede. La gente también lo sabe. No podemos partirnos. Si queremos ganar, es con todos adentro”, amplía Agost Carreño.
El líder del Frente Cívico aprovecha el convite para descartar cualquier posibilidad de pelea por cargos. Mucho menos con De Loredo, con quien espera ratificar un tándem exitoso. Tal es la confianza en la solidez del acuerdo que ni siquiera considera la posibilidad de una compulsa al interior de JxC. Tampoco reafirma su postura de reclamar la candidatura a la gobernación.
“Ni siquiera vamos a tener internas. Está todo hablado. No podemos repetir los errores de 2019. Vamos a agotar los mecanismos necesarios para evitar disputas. Vamos a armar un equipo para ganar, con los mejores. Ya vamos a ver quién está mejor, aunque aún falta mucho”, sentencia el senador nacional.