Diez entidades industriales del noroeste (NOA) y noreste (NEA) argentino presentaron un proyecto de ley de promoción de las economías regionales para esa región del país, que incluye fuertes reducciones impositivas a cambio de la radicación de fábricas. El plan llegó a manos de los gobernadores, que evaluarán las posibilidades reales de aplicación y sus beneficios a largo plazo. De prosperar, la iniciativa llegará al Senado, donde los mandatarios provinciales tienen poder de fuego para imponer agenda, y buscará equiparar a las provincias norteñas con los beneficios que tienen las del centro y las del sur, que en la actualidad cuentan con distintos subsidios al sector.
La unidad de las industrias del denominado Norte Grande es novedosa, a pesar de que la Unión de Industrias del Norte Argentino (Uninoa) existe desde hace años. Casi al calor de la reaparición de la liga de gobernadores, los empresarios buscaron limar las asperezas de intereses particulares que tiene cada provincia. Hasta el momento, llegaron a lograr con éxito la presentación del proyecto de ley para la creación de un "Régimen de Promoción Políticas Fiscales diferenciadas para el desarrollo productivo del norte argentino".
En esta ocasión, el conglomerado de entidades industriales tendrá que tener una estrategia en común para que la iniciativa avance. "Los gobernadores tienen que entender el alcance y los beneficios (del proyecto), y, para eso, hay que ser claros y tener una estrategia conjunta. Es necesario dejar algunos personalismos de lado y esa tarea no será sencilla porque, a medida que avanza la propuesta, se empieza a ver a referentes con la intención de sumarse pergaminos a su favor para lograr objetivos personales", se quejó uno de los presidentes del Uninoa, en diálogo con Letra P.
La avanzada del norte fue tan contundente en los últimos meses que se transformó en una "agenda paralela" a la Unión Industrial Argentina (UIA), que preside Daniel Funes de Rioja. Las diez entidades del Uninoa son organizaciones de tercer grado que pertenecen a la entidad centenaria, con sede central en Capital Federal. "Los temas que se debaten en la UIA no representan las necesidades del Norte Grande", dijo otro líder empresario del interior provincial.
"No es una UIA paralela. La Uninoa es sólo una alianza estratégica y está trabajando ejes regionales muy específicos, y nos estamos potenciando con la asamblea de gobernadores que traccionan muy fuerte con el poder central", aclaró otra de las patas del conglomerado de empresarios que redactó el proyecto de ley. De hecho, la misma fuente confió, a este medio, que ya mantuvieron un contacto con el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, quien les garantizó su apoyo y un inicio de gestiones con el bloque de legisladores que responden a su conducción para impulsar el plan industrial.
El grupo empresario le entregó la semana pasada a los diez gobernadores el proyecto de ley con la idea de "obtener una devolución para que los equipos técnicos de Uninoa y del Consejo del Norte Grande lo trabajen en mayo en la reunión que habrá en Tucumán". "Si esta todo ok, se presentaría en el Senado. En el ínterin, cada unión industrial irá hablándolo con sus representantes en las cámaras legislativas nacionales para hacer correcciones de modo que llegue lo más tratable posible a las comisiones pertinentes", confió una fuente ligada al sector privado.
Varias de las empresas que integran las diez entidades del Norte Grande tienen fuerte peso específico en la economía nacional. Por caso, en Jujuy lidera Ledesma, con el administrador general del ingenio en el NOA, Federico Gatti, como presidente de la UIA jujeña. También es el caso de Jorge Rocchia Ferro, dueño del Grupo Los Balcanes, que controla la mayor zafra del país, entre otros negocios. En La Rioja, el empresario textil Bogos Ekserciyan encabeza la Unión de Industrias Riojanas (Unir).
En el cónclave, que se realizó en Salta, estuvieron el jefe de Gabinete, Juan Manzur, los gobernadores Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Jorge Capitanich (Chaco), Oscar Herrera Ahuad (Misiones), Raúl Jalil (Catamarca), Gustavo Valdés (Corrientes), Gustavo Sáenz (Salta), Morales (Jujuy), Ricardo Quintela (La Rioja) y el vicegobernador Eber Wilson Solis (Formosa).
Bajar impuestos
El proyecto de ley, al que accedió Letra P, plantea "incentivos impositivos" para las provincias del NOA y NEA que adhieran a la normativa. La iniciativa contempla una reducción del 50% en el impuesto a las ganancias y una baja a los combustibles, al IVA, a las contribuciones patronales y a los Débitos y Créditos establecido por Ley 25413, que "podrán computar la totalidad del importe pagado a cuenta del Impuesto a las Ganancias del año de su devengamiento".
En términos de comercio exterior, la propuesta pide dejar "exenta del pago de los derechos de importación y de todo otro derecho, impuesto especial o gravamen a la importación o con motivo de ella, con exclusión de las tasas retributivas de servicios, la introducción de bienes de capital, herramientas especiales o partes y elementos componentes de dichos bienes, que sean destinados a ser utilizados directamente en el proceso productivo" para las empresas "radicadas y/o que se radiquen en las provincias del NOA y NEA, considerados a valor FOB puerto de embarque y en tanto los mismos no se produzcan en el país en condiciones de eficiencia, plazo de entrega y precios razonables".
También habrá premios para las inversiones, gracias a un "diferimiento del pago de las sumas que deban abonar en concepto de impuesto a las ganancias e impuesto al valor agregado" en un monto de hasta el 75% de la imposición. Para ingresar al plan, las inversiones "deberán mantenerse en el patrimonio de inversores titulares por un lapso no inferior a cinco años contados a partir del 1º de enero siguiente al año de la efectiva inversión". "De no mantenerse en el patrimonio la inversión efectuada, corresponderá ingresar los tributos no abonados con más los recargos por mora", señala la iniciativa.
El sector empresario del Norte Grande buscará lograr la creación del Indicador Económico “Densidad Empresaria”, definido como la cantidad de empresas formales que declara al menos un empleado en relación de dependencia permanente, cada mil habitantes en un territorio determinado.
En caso de aprobarse, el régimen se aplicará "por lo menos 20 años desde la fecha de puesta en marcha de cada proyecto". "Superado este plazo, el régimen permanecerá activo mientras los valores del Indicador Económico de Densidad Empresaria, creado por el artículo 20º, entre la Región Norte (NOA y NEA) sea inferior al Promedio de la Zona definida por el INDEC como región Pampeana. Una vez eliminado este diferencial, los beneficios del régimen se reducirán en un veinte por ciento (20%) cada año, hasta quedar definitivamente sin aplicación", afirma.