El presidente del radicalismo, Gerardo Morales, salió con los tapones de punta para rechazar los elogios que el expresidente Mauricio Macri le regaló a su par Carlos Menem, aseguró que la UCR es "un partido democrático, no una empresa" y repudió “las políticas neoliberales implementadas por el menemismo en los 90 que hoy reivindican algunas voces de la política argentina”.
En un nuevo capítulo de su posicionamiento con vistas a las elecciones presidenciales de 2023, el gobernador de Jujuy, que suele confrontar con el alcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta, uno de sus rivales del PRO en Juntos por el Cambio rumbo a las presidenciales, cruzó esta vez de manera rotunda a Macri, quien alabó al exmandatario riojano por haber "unido a los argentinos" y "pacificar" el país.
"La UCR es un partido democrático, no una empresa. Tenemos dirigentes políticos, no CEOs. Estamos construyendo un programa político federal, no uno de negocios. Queremos que las cuentas cierren, pero con un pueblo que tenga trabajo, salud, educación y seguridad", tuiteó Morales.
Morales se distanció del fundador del PRO, al que corrió por izquierda trazando una comparación implícita con el paso del ingeniero por la Casa Rosada. "Ponemos por delante los valores republicanos, la justicia social, la libertad, la igualdad y los Derechos Humanos. Estamos construyendo un programa que saque a la Argentina de la alternancia retrógrada", lanzó.
En tren de chicana y como un guiño a los sectores más progresistas de la UCR, a los que cualquier candidato radical no deja de mentar más allá de la real existencia de ese subgrupo, Morales sostuvo: "Nuestro pensamiento sigue sosteniéndose en los principios e ideas de Raúl Alfonsín, que no han perdido vigencia".
Tras poner como ejemplo algunos aspectos de su gestión en la provincia norteña, Morales cerró su mensaje en redes sociales trazando una línea clara para diferenciarse de la reivindicación de Macri. "Rechazamos las políticas neoliberales implementadas por el menemismo en los 90 que hoy reivindican algunas voces de la política argentina. Estás medidas destruyeron nuestro aparato productivo, nos hicieron más pobres y terminaron con la esperanza de nuestro pueblo", concluyó.