A medida que aumenta en su intensidad, la pelea entre la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, divide las aguas en Juntos por el Cambio (JxC) de cara cara a las elecciones de 2023. Lanzados al armado de sus candidaturas presidenciales, agrupan sus tropas a lo largo y a lo ancho del país para las batallas por venir.
Desde hace tiempo, la ministra de Seguridad del gobierno de Cambiemos viene sumando dirigentes a su nido de halcón. Con la candidatura de Mauricio Macri en veremos, la exfuncionaria se muestra como la mejor opción para el electorado duro del PRO. Lejos de bajar los niveles enfrentamiento dentro de la interna amarilla, Bullrich no duda en ir al frente y marcar sus diferencias con el alcalde porteño, a quien le cuestiona su manera de gobernar.
El team Bullrich suma a varias figuras históricas del PRO como el expresidente provisional del Senado Federico Pinedo, el diputado Pablo Tonelli, la extitular de la Oficina anticorrupción Laura Alonso, la exembajadora de la OEA Paula Bertol y el diputado santafesino Federico Angelini, quienes militan su candidatura para que ocupe el sillón de Rivadavia.
En la provincia de Buenos Aires, procura tener buena relación con el diputado Cristian Ritondo, quien ya anunció que será candidato a gobernador por el PRO, y con el intendente de Lanús, Néstor Grindetti, quien también quiere ser el sucesor de Axel Kicillof. Sostienen que, en el caso de que Macri no sea candidato a presidente, Bullrich es la dirigente que mejor representa esa forma de conducción.
Quien también se suma a ese pack es el jefe comunal de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel, que fue el primero que se anotó como candidato bullrichista en la disputa por la gobernación. Al poco tiempo de que se sumó a esas filas el extitular de Vialidad Nacional, llegó el momento de dar el salto del senador provincia Joaquín De la Torre, que juega como extremo por derecha en la cancha amarilla.
Por fuera del PRO, Bullrich tiene un estrecho vínculo con el senador radical Alfredo Cornejo. Incluso, se muestra con el exgobernador de Mendoza como una posible fórmula presidencial para competir el próximo año. También, mantiene una buena relación con el exsenador peronista Miguel Ángel Pichetto, quien fue compañero de fórmula de Macri en 2019.
El palomar
Como la otra cara de la misma moneda, Larreta también busca ostentar su músculo dentro y fuera del PRO. A la dirigencia que tienen bajo el paraguas de la Ciudad se le suma un grupo de intendentes y figuras de la provincia de Buenos Aires. Su tropa bonaerense ya se comprometió a trabajar para que Diego Santilli sea el próximo gobernador.
Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Julio Garro (La Plata), Ezequiel Galli (Olavarria), Guillermo Montenegro (Mar del Plata), Pablo Alaniz (Florencio Varela), Martiniano Molina (Quilmes) y Lucas Delfino (Hurlingham) son algunos de los referentes que están dentro de esa categoría. Luego se encuentran los del resto de las provincias que, en su mayoría, confluyeron en el encuentro que realizó el jefe de Gobierno en Palermo hace unas semanas.
Sin embargo, la apuesta de Larreta por estos días no está dentro del PRO, sino afuera. Con las dudas que le genera la indefinición de Macri, el alcalde porteño quiere tener el respaldo de la UCR a modo de contrapeso. En el partido centenario, los vínculos más fuertes con los que cultiva con el senador Martín Lousteau y con el diputado Emiliano Yacobitti.
De ellos se desprende la relación con la cúpula nacional y la “renovación” boinablanca, donde sobresalen el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, y la senadora santafesina Carolina Losada.
Siempre dentro de JxC, quien también ficha en la tropa larretista es la exdiputada Elisa Carrió. Enojada por la forma en la que se desenvuelve Macri y por las cosas que dice el expresidente, la fundadora de la Coalición Cívica apuesta a la forma de conducción del jefe de Gobierno.