Mauricio Macri oficializó en la noche de este jueves su bendición a la candidatura de su amigo Andrés Ibarra, exministro de Modernización tanto en la Ciudad como en la Casa Rosada, para arrebatarle el comando de Boca Juniors a la dupla Jorge Amor Ameal y Juan Román Riquelme en las elecciones que el club de la ribera afrontará en 2023.
El lanzamiento de Ibarra como candidato del Movimiento Pasión y Gestión xeneize se llevó a cabo en un local del barrio porteño de San Telmo, donde se homenajeó a Macri al cumplirse 15 años del final de su gestión al frente de la institución (1995-2007), y mientras la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner arengaba a la militancia kirchnerista en el Estadio Único de La Plata.
“Boca tiene que estar por encima de todos, donde nadie con individualismos destructivos pueda poner en riesgo el beneficio de los demás”, dijo Macri en la oficialización de Ibarra como candidato de la oposición xeneize, y agregó: “Nunca vas a ganar cosas importantes si no tenés dirigentes trabajadores, un cuerpo técnico inteligente y jugadores talentosos y responsables”.
Ibarra, por su parte, destacó los “grandes logros” de Macri al frente del club y aseguró que quiere ser presidente de Boca para que “vuelvan las grandes copas y volver a recuperar la gloria perdida”.
“Boca merece una conducción profesional, moderna, con mucha pasión y sobre todo mucha gestión, donde el equipo sea más que las individualidades”, sostuvo Ibarra en su presentación, y exhortó: “Hay que poner a Boca por encima de todo y de todos, promoviendo siempre la unidad. Sobre la base de un trabajo honesto, apasionado e inteligente, quiero conducir un nuevo proyecto”.
Participaron del acto de reconocimiento a la gestión de Macri al frente de Boca, el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel; el vicepresidente primero del Consejo de la Magistratura de la Ciudad, Francisco Quintana; el expresidente del club Daniel Angelici y otras referencias institucionales como Gregorio Zidar, Carlos Ben, Horacio Paolini, Oscar Ríos, además de jugadores de la época de gloria boquense.
Como anticipó Letra P, Macri eligió a Ibarra hace algunos meses, mientras tejía su candidatura en distintos ámbitos de la vida política xeneize. La relación entre ambos acumula décadas, empresas y mandatos de gobierno. Ibarra aterrizó en el Grupo Socma, una de las principales empresas de la familia Macri, cuando tenía apenas 22 años. Fue gerente de control de gestión de la constructora Sideco S.A., director financiero y comercial en Autopistas del Sol, y director comercial y de marketing de Correo Argentino. En 2004, Macri lo designó gerente general de Boca y, cuando llegó a la Ciudad y a la Nación, ministro de Modernización.