Los deseos del oficialismo de aprobar esta semana en Diputados los cambios al impuesto a las ganancias se nublaron en medio del postergado debate por la prórroga de la ley de biocombustibles, que sumó un nuevo capítulo este lunes, con el anuncio del secretario de Energía, Darío Martinez, de debatir un nuevo régimen para el sector. La propuesta fue planteada en la reunión de la Comisión de Energía y Combustibles, pero sucede cuando la oposición acordó con el lavagnismo un pedido de una sesión especial este jueves con el objetivo de tratar la prórroga de la ley vigente, que fue aprobada en noviembre por unanimidad en el Senado, pero que todavía no tiene dictamen en Diputados.
Al cierre de esta nota, ninguno de los representantes del Frente de Todos aclaró si la decisión consiste en acompañar la prórroga de la ley, que vence el 12 de mayo, y luego continuar con el debate de una nueva ley, o si el plan apunta a introducir un nuevo texto que reemplace el régimen vigente y que deba ser debatido con celeridad en las dos cámaras del Congreso. Ese trámite deberá avanzar en la Comisión de Energía y Biocombustibles, que preside el mendocino Omar Félix (FdT), y que funcionó por primera vez este lunes, luego de una inactividad que abarcó todo el 2020.
Tal como anticipó Letra P, el oficialismo preparaba una nueva ley para el sector que podría ser presentada por el santafesino Marcos Cleri. Según confiaron distintas fuentes opositoras, referentes del bloque que conduce Máximo Kirchner hicieron circular un borrador sobre un nuevo régimen que se extendería hasta 2030 y que reduce el porcentaje mínimo de corte obligatorio para la venta de gasoil y naftas del 15 y 10% al 5% y 7%, pero al mismo tiempo fija que la totalidad de ese porcentaje debe ser distribuido entre PyMEs productoras de bioetanol y biodiesel. La idea es dejar afuera a los oligopolios del sector y evitar la injerencia de la industria petrolera, pero cada punto forma parte de un borrador que no se ha plasmado en un texto definitivo.
Las mismas dudas rondan sobre el interés del oficialismo respecto de la prórroga. Uno de los jefes parlamentarios opositores que fue parte de los sondeos del FdT está seguro que el objetivo inicial es "bloquear la prórroga con un nuevo proyecto de ley que puede tener puntos positivos, pero que no se puede tratar a las apuradas y menos sin certezas para el sector sobre el régimen que rige desde 2006".
En el PRO también recibieron los sondeos y consideran que no hay una precisión del oficialismo porque "todavía no se han puesto de acuerdo". La posición del FdT sobre apoyar la prórroga o no es determinante para Juntos por el Cambio y el interbloque del lavagnismo, porque ambos espacios unificaron sus pedidos de una sesión especial para este jueves con el objetivo de tratar el texto que fue aprobado en el Senado, aunque todavía no tiene dictamen en Diputados.
En los planes originales del oficialismo, el jueves aparecía como una fecha posible para llevar al recinto los cambios en el Impuesto a las Ganancias, que fueron acompañados por unanimidad la semana pasada en el plenario de las Comisiones de Presupuesto y de Legislación del Trabajo. Sin embargo, si no se canalizan las diferencias sobre el tema biocombustibles, el jueves estará dominado por una sesión especial donde la oposición buscaría dejar en evidencia los riesgos para el sector sin una prórroga de la norma que ya tiene la aprobación del Senado. Para lograrlo deberán reunir 129 voluntades y la reunión de este lunes podría restarle el apoyo de algunos aliados. De un modo u otro, el reclamo de la prórroga se corporizará dentro del recinto y fuerza al oficialismo a planificar una nueva fecha para tratar los cambios en Ganancias. No era el plan original del Frente de Todos, que pretende votar el cambio impositivo lo antes posible y planificaba convocar a una sesión para este jueves.
La posibilidad de una eventual postergación del tratamiento de Ganancias fue leída en la oposición como un abrazo del oso del oficialismo. El titular del interbloque de JxC, Mario Negri, se encargó de aclarar que una cosa no tiene que ver con la otra. "En JxC estamos dispuestos a sesionar más horas e incluso continuar el viernes si el oficialismo decide convocar posteriormente a una sesión por Ganancias y Monotributo. No hay trabas", tuiteó el diputado radical. Poco después el espacio difundió un comunicado donde informó que pidió una segunda sesión para tratar los cambios impositivas "inmediatamente después de la sesión pedida para prorrogar la ley de Biocombustibles". Lo hizo "ante las versiones periodísticas que pretenden responsabilizar a JxC por la falta de convocatoria del oficialismo a la sesión para modificar Ganancias".
Para la aritmética del oficialismo la nueva norma podría obtener el respaldo de aliados esquivos, como el lavagnismo y los representantes del bloque Córdoba Federal, pero ambos espacios exigen que primero se vote la prórroga como parte de un "ciclo virtuoso" que sea acompañado por una nueva ley para el sector. Casi sobre la finalización de la reunión de la Comisión de Combustibles, los representantes de JxC plantearon que "por lo menos" se acuerde una prórroga del régimen hasta fin de año, tal como lo propuso inicialmente el radical Fabio Quetglas.
La posibilidad de una prórroga más corta también despierta interés en las diputadas y diputados del oficialismo que representan a provincias que tienen producción de biocombustibles y es una de las diferencias internas del conglomerado oficialista.
La renovación de la ley 26.093 es una asignatura pendiente para el oficialismo desde el año pasado. Las primeras incógnitas surgieron cuando el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, se comprometió a incluir ese texto en el periodo de extraordinarias, algo que finalmente no sucedió. Para defenderse, el tigrense hizo circular una carta donde le solicitaba al Ejecutivo la inclusión de ese tema, pero toda la oposición lo cuestionó por incumplir su palabra.
Hace un mes, el presidente Alberto Fernández dijo que quería introducir cambios a la prórroga enviada por el Senado. Por entonces ya había comenzado la redacción de un texto alternativo, aunque ahora quedan 50 días para el vencimiento del régimen vigente y el oficialismo deberá transitar una agenda muy apretada, sin definir todavía qué quiere hacer con la prórroga.