Los intendentes de Juntos por el Cambio que participaron este jueves de la videconferencia con autoridades del Ejecutivo bonaerense donde se evaluó cómo continuar la cuarentena en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) le pidieron al gobernador Axel Kicillof que habilite algunas actividades que consideran clave para la recuperación económica, para lo cual consideraron que debe alterar la denominada fase 3. Pusieron como ejemplo la construcción privada y la gastronomía. Para la primera actividad presentaron un protocolo. El pedido va en sintonía con las “miniaperturas” que propone el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y con el reclamo de la Asociación Pymes de la Construcción Provincia de Buenos Aires (Apymeco). Pese a todo, la Provincia, como expresaron algunos jefes comunales peronistas, pretende mantener las restricciones de la actual fase de aislamiento. Este jueves, el Presidente recibe a ambos mandatarios para definir cómo seguir.
Como sucede cada vez que se agota la etapa del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), el gobernador reunió a los jefes comunales del conurbano. Escuchó el pedido en su despacho de la Gobernación acompañado del Jefe de Gabinete, Carlos Bianco; la ministra de Gobierno, Teresa García (por videoconfernecia); el ministro de Salud, Daniel Gollán; y el viceministro Nicolás Kreplak. El oficialismo, por su parte, le pidió que medie para que las aperturas que lleve adelante Rodríguea Larreta sean en consonancia con lo que se determine para el territorio bonaerense, es decir, que haya un mismo plan para todo el AMBA. Es algo difícil de concretar: la Ciudad evalúa permitir, por ejemplo, la práctica de deportes individuales a partir de la próxima semana.
Kicillof y sus ministros, en gobernación. Del otro lado de la pantalla, el intendente de Esteban Echevarría, Fernando Gray.
El planteo de intendentes opositores se funda en la presión de constructoras para volver a funcionar y en la necesidad de atemperar el impacto de la crisis económica en sectores vinculados directa o indirectamente a la construcción, entre los que se cuentan corralones, ladrilleros, zinguerías, techistasy albañiles, entre otros oficios.
Actualmente, la obra privada está habilitada en distritos que se encuentran en fase 4 y 5. El conurbano está en fase 3 y en virtud de la escalada de contagios por la transmisión comunitaria no se avisora un cambio al respecto. En el Ejecutivo avisan que no van a cerrar actividades que ya están funcionado, pero que tampoco abrirán nuevas. Al menos por los próximos 15 días
“La construcción necesita reactivarse. Hoy obras pequeñas, medianas (dúplex, pequeños edificios, locales comerciales) y grandes que están pendientes de iniciarse; y miles de vecinos que quieren construir su primera casa, no pueden hacerlo”, remarcó el intendente de La Plata, Julio Garro, tras la reunión. Coinciden con esa postura otros jefes comunales, como Diego Valenzuela, de Tres de Febrero.
La tipificación de fase 3 corre para los municipios “en los cuales se haya producido un brote o un aumento significativo y repentino de casos COVID-19, cuando, a partir de la identificación de los primeros casos autóctonos, se observare un incremento en la velocidad de transmisión medida en términos de tiempo de duplicación o la ocurrencia de casos autóctonos en donde se verifique que la cadena de transmisión se corresponde con un escenario de transmisión comunitaria. Asimismo, estarán en FASE 3 los municipios que de acuerdo a lo establecido en el artículo 11 del Decreto Nacional N° 641/2020, integran el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA)”. Los distritos de fase 4, donde está habilitada la construcción privada, son aquellos que “en las últimas dos semanas inmediatas anteriores a la fecha de evaluación que realice el Ministerio de Salud, hayan tenido más de diez (10) nuevos casos de COVID-19 cada cien mil (100.000) habitantes, en al menos alguna de las semanas”.
El pedido de intendentes de JxC va en línea con la postura la Apymeco. La asociación de pequeñas construcciones reclamó a Kicillof la reapertura en el Gran La Plata de pequeñas obras privadas. En diálogo con este medio, su presidente, Fernando Mango, dijo: “Cinco meses sin trabajar para una empresa constructora es insostenible”. Y agregó que no hay “ahorro que lo soporte”. El representante de la entidad también describió que le habían presentado al gobierno un protocolo para trabajar en obras de más de 500 metros cuadrados, con un protocolo y decreto que lo habilite en fase 3. Entre las características del protocolo emergía que las empresas se harían cargo del transporte del personal y que no habría movilidad interregional.
Kicillof anotó el pedido, pero por el momento no hubo avances. La intención es evitar la saturación del sistema sanitario que ya se encuentra con un alto nivel de demanda. “Estamos en una situación delicada, pero seguimos haciendo un amplio esfuerzo y compensando el crecimiento de casos con la ampliación del sistema sanitario”, sostuvo el gobernador.
