No habrá foto ni discurso conjunto, pero Horacio Rodríguez Larreta avanzará este viernes con nuevas aperturas en el marco de la cuarentena por coronavirus en la Ciudad de Buenos Aires. Con el foco de la crisis sanitaria en el interior y con un relajamiento de la cantidad de casos y del uso de camas de terapia intensiva en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), el entendimiento del gobierno porteño con Alberto Fernández no acarreó mayor debate y se cerró esta mañana durante una conversación telefónica entre el Presidente y el jefe de Gobierno.
Hablaron de la situación general y le pusieron el sello a las habilitaciones que requieren un decreto nacional. Al momento del diálogo, Fernández se disponía a viajar hacia Misiones para el anuncio oficial de prórroga del aislamiento y Rodríguez Larreta repasaba el discurso del anuncio que hará por la tarde en Parque Patricios.
El camino había sido allanado en la semana por los jefes de Gabinete, Santiago Cafiero y Felipe Miguel, que no se reunieron presencialmente. Por primera vez desde que comenzó el aislamiento, no hizo falta bilateral en ninguno de los niveles. La negociación fue exclusivamente mediante mensajes y llamadas, a tono con el distanciamiento al que quedó forzada la política producto de la pandemia por coronavirus. Incluso, en el gobierno porteño adelantan que para las próximas habilitaciones podría repetirse el mismo esquema y, depende el tenor de los permisos, hasta no sería necesario una reglamentación nacional, como ocurrió con disposiciones en torno al uso de espacios comunes de edificios.
Mancillado por el recorte de la coparticipación, el diálogo entre Fernández y Rodríguez Larreta quedó acotado a la gestión de la crisis sanitaria, como quedó comprobado el jueves por la tarde cuando el alcalde participó de la videoconferencia del Presidente con los otros 21 gobernadores y las dos gobernadoras. La conversación de este viernes fue cordial, pero breve. Después, el jefe de Gobierno continuaba con su agenda: visitaba el entrenamiento de la Policía de la Ciudad y un shopping que ya fue habilitado. Se disponía a pasar toda la tarde en la Jefatura de Gobierno, desde donde miraría el anuncio del Presidente y luego haría su propia comunicación, flanqueado por sus ministros y el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli.
APERTURAS. De acuerdo a lo acordado, la Ciudad permitirá que bares y restaurantes utilicen el 30% de los salones interiores con una cantidad limitada de clientes.
Además, la administración porteña propone sumar el uso de espacios comunes como gimnasios y piletas en edificios. Hace días, quedó habilitada la utilización de parrillas y lavaderos. También, actividades de fin de ciclo en laboratorios y talleres universitarios.
En la Ciudad, remarcan que el nivel de contagios llegó a una media diaria de entre 700 y 800. Ese diagnóstico se confirmó esta semana, con un promedio de 700 contagios entre los primeros cuatro días de la semana.
