OPERACIÓN GOBERNABILIDAD

Macri llamó a Massa para sumarlo al pacto, pero se llevó un duro revés

Hablaron este sábado, tras casi tres años sin contacto. El líder renovador reafirmó que un acuerdo así no puede tener exclusiones y, por ahora, rechazó el convite.

Mauricio Macri llamó a Sergio Massa para convencerlo de que se sume al acuerdo de diez puntos que, hasta ahora, solo miran con algo de simpatía Juan Manuel Urtubey y Miguel Pichetto, mientras que Roberto Lavagna se despegó y la ex presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, ni siquiera fue invitada. No hablaban hace casi tres años, cuando en junio de 2016 el Presidente se contactó desde Colombia con el líder del Frente Renovador para pedirle que preste los votos de su bloque para habilitar que familiares de funcionarios puedan ingresar al blanqueo de capitales que por entonces discutía la Cámara de Diputados. Como en esa oportunidad, este sábado el jefe de Estado cortó la llamada con las manos vacías.

 

Tras los primeros acercamientos entre Pichetto y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, ahora es Macri quien se puso al hombre, personalmente, las negociaciones para que el promocionado pacto de gobernabilidad se transforme en algo más que una foto con un sector marginal del peronismo, sin poder real y con escaso caudal de votos. En esa lógica llamó a Massa, quien el viernes había dejado claro su rechazo a ese convite.

 

Según pudo reconstruir Letra P, Macri le aclaró a Massa que el listado de diez puntos era “un mensaje” que el Gobierno quería enviarle “al mundo”, para dar muestras de estabilidad, tanto política como económica.

 

El ex intendente de Tigre le entregó, como toda respuesta, un resumen de su posicionamiento público del viernes. Le dijo que un acuerdo de esa envergadura no se hace “con buenos y malos elegidos por el Gobierno” y que esos diez puntos no reflejaban “la agenda urgente de hoy”.

 

 

Sin avances, la conversación no tuvo viraje hacia otros temas y ambos dirigentes quedaron parados en el mismo lugar en que estaban antes del llamado. Según fuentes massistas, lo único distinto de toda la charla fue que Macri dijo que “iba a intentar” ampliar la convocatoria a otros sectores, como las pymes y el sindicalismo, que Massa reclamó la semana pasada desde su búnker de Libertador 850.

 

Hasta ahora, si el plan del Gobierno era usar este acuerdo como una cuña en la oposición, la idea viene fracasando. No solo Massa sino que el propio Urtubey, el más cercano a la Casa Rosada de todos los lanzados a la pelea por la presidencia, advirtió que en un llamado político así “no puede haber” exclusiones. Igualmente, dejó un mensaje ambiguo ya que aclaró que él viene “insistiendo en la necesidad de hacer algo este estilo desde hace mucho tiempo”, así que “hay que ser coherente con lo que uno plantea”.

 

 

 

La misma ambigüedad viene mostrando el Gobierno. Al menos a la hora de ponerse al frente de la convocatoria ya que, hasta aquí, han intentado mostrarlo como un pacto bilateral con un sector de la oposición o han abrazado terminología confusa, como cuando el propio Presidente dijo que se habían “autoinvitado” a un plan de consenso político.

 

Algo parecido hizo el mismo Frigerio, quien si bien no descartó un encuentro entre Macri y Cristina, sostuvo que “no es una responsabilidad del oficialismo nada más”.

 

massa se corre y lanza el neomassismo para diferenciarse de macri
El PRO bonaerense, en Lobos.

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