La senadora Cristina Fernández de Kirchner pateó el tablero y puso a la política nacional en estado de shock: este sábado, con un video posteado a las 9 de la mañana en sus redes sociales, anunció que será candidata, pero a vicepresidenta. El postulante a la presidencia por el peronismo K será Alberto Fernández, su ex jefe de Gabinete, con quien estuvo diez años distanciada y había vuelto a ser su mano derecha.
"Le he pedido a Alberto Fernández que encabece la fórmula que integraremos juntos", dice CFK en un video de 12 minutos 41 segundos que subió a su canal de Youtube. Y aclara: "Él como candidato a presidente, yo como candidata a vice". El renunciamiento vino en esta frase: "Quiero ser la primera en ejercer el acto de responsabilidad ciudadana, dejando de lado ambiciones o vanidades personales".
De esta manera, la ex presidenta soltó una bomba en el escenario político con una jugada que apuesta a perforar su techo de intención de voto con un candidato a presidente identificado con el primer kirchnerismo, el de Néstor Kichner, un dirigente de buenos vínculos con todo el arco del peronismo.
Alberto Ángel Fernández tiene 60 años, es abogado, porteño hasta la médula. Fue jefe de Gabinete de la Nación entre el 25 de mayo de 2003, cuando asumió Kirchner la presidencia, y el 23 de julio de 2008, cuando dejó el cargo en medio de la crisis del gobierno de Cristina con el campo en manos del ahora precandidato a presidente por el peronismo federal Sergio Massa.
Alberto F. se distanció entonces de Cristina y fue muy crítico sobre todo de su último mandato, al punto que, una vez creado el Frente Renovador en 2013, se sumó a las filas de quien había sido su sucesor, justamente Massa. En las últimas elecciones, fue arquitecto de la candidatura a senador nacional de Florencio Randazzo, ex ministro del Interior de CFK, en una jugada muy criticada por el kirchnerismo por, a su criterio, restar votos a Cristina en la pelea con Cambiemos.
La política, desde el propio kirchnerismo hasta la Casa Rosada, pasando por el peronismo del medio de Massa y Roberto Lavagna, esperaba la definición de Cristina. Se especulaba en las últimas horas con la posibilidad de que Alberto Fernández fuera su compañero de fórmula. De hecho, se movía como su jefe de campaña: este viernes, reunió a los intendentes krichneristas del conurbano en un almuerzo con Martín Insaurralde, el jefe comunal de Lomas, como anfitrión.
Como en las películas en las que el desenlace pone de relieve datos de su desarrollo que terminan configurándose como reveladores, ahora cobra relevancia lo que ocurrió hace diez días en la Feria del Libro, cuando Cristina dedicó un largo párrafo a Alberto Fernández, a quien le agradeció por haberla alentado a escribir el libro "Sinceramente".
En el video que publicó esta mañana, Cristina destaca que conoce a Alberto "desde hace 20 años", pero reconoce que con él tuvo "diferencias".
Una frase de su mensaje esconde lo que, a priori, sería el objetivo de CFK: jugar para mantener sus votos en la cancha, pero correrse del foco central para permitir la ampliación de la base social del kirchnerismo. "Fue jefe de Gabinete de Néstor durante toda su presidencia y lo vi junto a él decidir, organizar, acordar y buscar siempre la mayor amplitud posible del Gobierno", dice la senadora.