El ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires oficializó este viernes una medida que llegó hace esta semana a once jefaturas departamentales de la policía bonaerense, cuyos comisarios fueron informados sobre la instalación de aparatos biométricos en distintas dependencias para controlar los horarios de ingreso y egreso de los uniformados a sus puestos laborales.
Si bien el titular de la cartera, Cristian Ritondo, anunció este jueves en la prensa que los 94.000 efectivos deberán fichar su entrada y salida al trabajo, mediante el registro de su huella digital, el proceso será paulatino y comenzará con 200 aparatos que se instalarán en La Plata y en el Conurbano.
La orden comenzó a circular desde este martes y llegó desde la Subcoordinación General Operativa de la bonaerense. Ritondo lo bautizó como “Despliegue DigiScan Web” para la instalacion de los aparatos comprados a la empresa IAFIS Biometrics & Forensics Argentina. La instrucción para los jefes de cada departamental incluye el acondicionamiento de los lugares donde estarán los aparatos y la designación de dos responsables por cada turno que tendrán acceso al sistema.
Los primeros destinatarios de las instrucciones fueron los jefes departamentales de San Martín, Quilmes, Quilmes, La Plata, La Matanza, Almirante Brown, Lanús, Pilar, Junín, Trenque Lauquen, Zárate- Campana y la Jefatura Departamental Conurbano Norte, a la que reportab los uniformados de Vicente López, San Isidro, San Fernando y Tigre.
Tras los primeros controles habrá un segundo capítulo en las comisarías del interior provincial: Mercedes, 25 de Mayo, Pergamino, San Nicolás, Coronel Suárez, Guaminí, Pehuajó, Azul y Tres Arroyos.
Hasta ahora se habían utilizado sistemas portátiles para la verificación de adicionales, con el objeto de acreditar la identidad y el cumplimiento de esas tareas.