El presidente Alberto Fernández almorzó con la cúpula de la Asociación Empresaria Argentina (AEA) y dejó algunas definiciones con guiños a sectores de poder, en el marco de las recientes medidas adoptadas y el plan económico para lograr el crecimiento. "No quiero un Estado intervencionista, quiero un Estado inteligente, que equilibre desigualdades en los mercados y que dé garantía a los que invierten”, expresó. Por primera vez desde que está al frente del Gobierno, Fernández asistió a un evento acompañado por su Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; y el ministro de Hacienda, Martín Guzmán.
La cúpula de AEA.
En el evento, una comida anual de la entidad que comandan Héctor Magnetto (Clarín), Luis Pagani (Arcor), Paolo Rocca (Techint), Fernández apeló al empresariado a que siga invirtiendo y creyendo en el país porque “vamos a ponerlo de pie, no tengan dudas”. “Tenemos que volver a poner de pie a la Argentina. Y eso lo hace un gobierno, lo hacen los que emprenden, los que invierten, lo hacen los que trabajan. Necesito que nos pongamos en marcha, rápidamente. Que miremos para adelante porque cada día que pasa hay un nuevo argentino que cae en la pobreza”, sostuvo.
El presidente afirmó que “el Estado vive una situación fiscal muy compleja” y remarcó que cuando plantea “un mayor esfuerzo a las empresas, al agro, a la industria, es para pagarle a los jubilados. Les pido que me ayuden a construir el futuro”. “No conozco capitalismo sin consumidores. Debemos promover inversiones, protegiendo nuestra industria, porque ustedes producen y dan trabajo, y no hay otro camino que no sea ese”, finalizó.