“En diciembre vamos a volver a aumentar los programas sociales y vamos a hacer otro pago extraordinario para los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo”, dijo el presidente Mauricio Macri luego de reconocer que esperaba un aumento de la pobreza, en una tendencia que será peor en los próximos meses. El dato sobre el "extra" para fin de año fue presentado como un anuncio pero, según explicaron fuentes de la Casa Rosada a Letra P, sólo se trató de un repaso de las medidas que ya había comunicado el Gobierno hace tres semanas.
La enumeración fue parte del breve “mensaje a la prensa” sin preguntas que el Presidente ofreció en Balcarce 50 pocos minutos antes de dejar a los ministros de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de Producción y Trabajo, Dante Sica, a cargo de las respuestas a las consultas periodísticas.
Sin hablar de montos, la alusión al “pago extraordinario” buscó aludir a los 1.500 pesos que recibirá cada madre o padre beneficiario de AUH antes de fin de año. Quizás por la exigua cifra del incremento, el aparato comunicacional de la Casa Rosada no aportó más detalles sobre los 1.200 pesos adicionales que ya fueron pagados este mes y que volverán a desembolsarse antes de navidad.
En rigor, desde ahora hasta fin de año, no habrá otra cosa que un pago extra para diciembre y la posible activación de la “salvaguarda social” que establece el acuerdo de endeudamiento con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dentro de un drástico ajuste fiscal para el año próximo que ya rige desde este semestre. “Vamos a utilizarla en caso de ser necesario y todo lo que estamos haciendo ya está especificado en 2018”, dijo Sica en referencia al uso de la cláusula que permite al Gobierno utilizar un adicional para ayuda social del 0,2% del presupuesto, un valor que tiene más peso simbólico que específico sobre un posible incremento de la ayuda social.
Con esa ausencia de detalles, el Gobierno desempolvó un plan, sin anuncios, para transitar los próximos tres meses de la recesión que se avecina. Será con el reconocimiento público del incremento de la pobreza, la aplicación de paliativos para fin de año y la reactivación de algunas herramientas de control de precios, como la ley de la competencia y una reformulación de la norma de lealtad comercial, dos instrumentos que ahora dependen del ministro Sica. El jefe de Producción revivirá el programa "Precios Cuidados" y buscará ampliar los mercados barriales para evitar la especulación de precios, dos iniciativas de la gestión anterior que fueron denostados hasta que arreció la crisis.
LA REFORMA QUE NO FUE. “Creemos que los acuerdos de precios y salarios nunca han tenido el impacto necesario porque las cadenas han cambiado fuertemente y han tendido a la cartelización. Por eso no han tenido muchos beneficios para la población”, aseguró el ministro en un tono casi autocrítico y explicó que ahora realizan “un monitoreo constante con las cadenas de producción y alimenticia para definir el programa precios cuidados, con una mayor atención en los productos y jugando como referencia de precios”, dijo el funcionario antes de reconocer que, “cuando hay mucha volatilidad, los precios tienden a desaparecer”.
Stanley ratificó el repaso de paliativos que había hecho Macri pocos minutos antes. Si bien no aportó ninguna medida nueva se encargó de confirmar la vigencia de la tarifa social del gas. “Todavía no sé como quedo pautado en el presupuesto, pero quiero llevarle tranquilidad a las familias que tienen tarifa social de gas, porque además de que se sostiene, las familias que ya la tienen la seguirán teniendo”, aseguró.
Luego de enunciar algunos mecanismos para intervenir en la formación de precios, Sica reinvidicó por su parte los proyectos de reforma laboral que quedaron frenados el año pasado en el Congreso. Sin la presencia del ex ministro y actual secretario de Trabajo, Jorge Triaca, Sica se calzó el traje de nuevo titular de la cartera laboral, ante las consultas sobre el atraso de los salarios ante el incremento de la inflación. “El promedio de convenios colectivos esta cerrado, pero todos incluían cláusulas de revisión y clausulas gatillo que empezaban entre septiembre y enero. Cada uno de los acuerdos se están cerrando en la secretaria de Trabajo”, dijo Sica y exhumó el desdoblamiento del proyecto original de reforma laboral que diseñó Triaca, su actual subalterno.
“Desde marzo o abril hay tres proyectos de ley que tienden a mejorar el sistema de relaciones laborales, como el blanqueo para combatir el desempleo informal, la ley del instituto de tecnologías médicas y la de formación profesional que están parados y no hemos podido avanzar en la discusión parlamentaria”, insistió el ministro. “Hay mucho mas para avanzar y son las reformas que necesitamos para tener ganancias de competitividad sistémica, aunque también hay cosas que se pueden hacer del ejecutivo, como las mesas sectoriales”, arengó el funcionario.
Hasta ahora el único cronograma de ayuda social vigente para los beneficiarios de AUH consiste en los refuerzos adicionales de 1200 pesos para septiembre y 1500 para diciembre.