La reunión de gabinete ampliado que encabezó el presidente Mauricio Macri este martes en el CCK contó, además, con otros siete oradores que se encargaron de apuntalar el ánimo de los presentes dentro de los encuentros regulares que organiza el Ejecutivo para motivar a las primeras y segundas líneas de Cambiemos. Sin embargo, la preocupación de los principales dirigentes sobre la caída de las encuestas se coló en el discurso del jefe de Gabinete, Marcos Peña, que, en medio de su arenga, reconoció, sin querer, que la mayoría de la población cuestiona el modelo M.
Este “rumbo goza de un fuerte apoyo, no solo del 40% de argentinos que hoy siguen diciendo que apoyan y adhieren a este Gobierno, sino muchos más que quieren que nos vaya bien por más que tengan dudas, miedos, desconfianzas y necesidades urgentes”, dijo el ministro coordinador tratando de transmitir seguridad a los mismos funcionarios que luego participan de los timbreos.
“Pero no dudemos de ese apoyo porque tiene que ser la nafta para este camino que estamos recorriendo”, insistió Peña para respaldar a sus huestes ante la creciente preocupación por las consecuencias sociales del ajuste, precisamente uno de los temas que mencionó la ministra de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley, durante la conferencia de prensa que ofreció luego del encuentro junto a otros dos oradores del evento: los jefe de los diputados y los senadores de Cambiemos, los radicales Mario Negri y Luis Naidenoff.
Poco antes, Macri fue el encargado de la motivación. "Atravesamos seis tormentas pero tenemos muy claro el rumbo y la convicción de lo que hay que hacer. Vinimos para cambiar en serio y para siempre nuestro país", arengó el Presidente. En el encuentro también hablaron la la vicepresidenta Gabriela Michetti, el ministro de Producción, Trabajo e Industria, Dante Sica, y su par de Hacienda, Nicolás Dujovne.