La compañía Trafigura desistió de comprar la petrolera Oil, la principal empresa del grupo de Cristóbal López, a través del procedimiento de cramdown o salvataje judicial, lo que dejó a esta al borde de la quiebra.
Según una nota presentada en el juzgado de Javier Consentino, Trafigura, de origen holandés, declaró que no está en condiciones de atender la deuda de Oil con la AFIP en 12 cuotas y sin planes especiales de pago, como reclama el organismo recaudador.
“Ante dicho escenario, resulta inviable que TASA pueda abonar o arribar a un acuerdo de pago de las deudas fiscales y tributarias de OCSA (Oil Combustibles) en las condiciones que las mentadas resoluciones internas de la AFIP establecen, aún asimismo en el hipotético supuesto que el organismo descarta de 96 meses ya que aún en dicha hipótesis la pretensión, al no condonar multas, intereses ni contemplar ninguna otra quita, resulta de tal cuantía que deviene en ruinoso desde el punto de vista económico la continuación del procedimiento de cramdown", dijo Trafigura en su escrito, según consignó el sitio de A24.
Así las cosas, si no aparece otro interesado, la quiebra de la petrolera parece inminente. El magistrado tiene plazo hasta este jueves para expedirse al respecto.
La deuda de Oil con la AFIP corresponde a la no liquidación del ITC, el Impuesto a las Transferencias de Combustibles, y ascendía originalmente a $ 8.000 millones. Sumando intereses y punitorios, llega hoy, según la Administración Federal de Ingresos Públicos, a unos de 19.000 millones de pesos.
La imposibilidad de acceder al pedido de Trafigura de hacer frente a ese pasivo en 96 cuotas se debe a que Oil, propiedad de López y Fabián de Sousa, es investigada por fraude al Estado y, según la Justicia, no habría incurrido en un caso simple de evasión.