La batalla política y judicial que libró Facundo Suárez Lastra para favorecer a Horacio Rodríguez Larreta en la interna de la Unión Cívica Radical de la Ciudad de Buenos Aires dio sus frutos: el jefe de Gobierno acaba de firmar un decreto para nombrar a María Inés Parry, una dirigente radical del riñón del ex intendente, en la administración local.
Parry, brazo político y territorial de Suárez Lastra en la Ciudad, asumirá como síndica general en la Corporación Buenos Aires Sur. Tomará el lugar del también radical Luis Cabillón, vinculado al ex presidente de la UCR local Emiliano Yacobitti y expulsado de ese organismo en el marco de la caza de brujas que emprendió Larreta contra todo funcionario que jurara lealtad a Martín Lousteau.
Suárez Lastra jamás negó su alianza con Rodríguez Larreta y fue, junto al histórico Jesús Rodríguez, de los primeros radicales en pedir la constitución de Cambiemos justo cuando el Gobierno porteño y los boina blanca cercanos a Lousteau se sacaban chispas en la Ciudad.
Además, como adelantó Letra P, los radicales en Cambiemos le plantearon al PRO que no entrarían en una disputa con sus correligionarios si no había discusión por candidaturas y lugares en el Gobierno. Tiempo después, el mendocino asumió como diputado nacional en la lista que encabezó Elisa Carrió en la Ciudad.
A fines de 2017, Suárez Lastra y Rodríguez judicializaron el proceso de internas en la UCR con el objetivo de retrasar los comicios para llegar con los tiempos para presentar una lista opositora a Yacobitti. La riña judicial duró semanas hasta que Daniel “El Tano” Angelici y Enrique Nosiglia, en acuerdo con el presidente Mauricio Macri, depusieron las armas y acordaron una lista de unidad para el Comité Nacional e internas en las comunas.