La elección interna que la Unión Cívica Radical de la Ciudad de Buenos Aires se preparaba para librar quedó provisionalmente suspendida por decisión de la juez federal porteña María Romilda Servini de Cubría (Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 1). La magistrada hizo lugar a un amparo presentado por un grupo de candidatos radicales cercanos al Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta que quiere enfrentar al oficialismo radical, liderado por Emiliano Yacobitti y Enrique “Coti” Nosiglia, principales promotores de Martín Lousteau.
La presentación la elevaron Facundo Suárez Lastra, Guillermo Suárez, Ariel Álvarez Palma y María Inés Parry, dirigentes de extracción radical que integraron las listas de Cambiemos en la Ciudad de Buenos Aires. El freno a los comicios internos dictado por la Justicia estira los tiempos para presentar listas y juntar avales, principal foco de conflicto.
Este grupo, liderado por el ex intendente porteño y el auditor Jesús Rodríguez, fue expulsado del partido por haber aceptado representar a Cambiemos (Vamos Juntos) en los últimos comicios legislativos. La Carta Orgánica que rige la vida política de la UCR porteña indica que debe ser expulsado todo aquel afiliado que acepte integrar una nómina que atente contra “los intereses” del centenario partido.
Sucede que entre ambos sectores se desangran por lo mismo porque la disposición institucional encierra una discusión filosófica: ¿Hacer una alianza con Mauricio Macri y Rodríguez Larreta indicaría ir contra los intereses de la fuerza que fundó Leandro Nicéforo Alem? ¿Competir junto a Lousteau también lo sería? Curiosamente, ambos sectores exponen ese vidrioso argumento.
La Justicia cedió ante el reclamo de Radicales en Cambiemos, que también juega con la venia de Ernesto Sanz. El fallo dispone suspender las elecciones pero también frenar la expulsión de estos candidatos de las filas de la UCR. La estrategia judicial para ralentizar el proceso eleccionario y ganar tiempo corre por cuenta de Daniel “el Tano” Angelici, que designó al ministro de Justicia y Seguridad porteño, Martín Ocampo, para que se encargue del tema. Otro de los cerebros jurídicos de la medida cautelar, según pudo saber Letra P, es Martín Scotto, director Nacional de Relaciones con la Comunidad del Ministerio del Interior y ex presidente de la UCR de la Comuna N°4 que reporta a Jesús Rodríguez.
Desde Radicales en Cambiemos denuncian que “no existe decisión orgánica” de expulsarlos y rechazan la decisión del Comité Capital. Sin embargo, en el espacio de Yacobitti se ajustan a la Carta Orgánica y reafirman que están fuera de la UCR.
Al mismo tiempo, los radicales aliados al PRO sostienen que la Junta Electoral del partido duplicó la cantidad de avales y “fue nombrada a dedo”. Desde La Cantera cuestionan la “intromisión” del Gobierno porteño y de algunos funcionarios, que buscaron letra por letra a los radicales afiliados que trabajan en la administración porteña. La capacidad de movilización del sector de Yacobitti, tras dos períodos consecutivos al frente del partido, es superior, pero el PRO puso a disposición de Suárez Lastra y Rodríguez todo el aparato amarillo con el que Elisa Carrió superó los 50 puntos en la Ciudad y apabulló a Lousteau, que acumuló 12% y quedó en tercer lugar, detrás del kirchnerista Daniel Filmus.