En perfecta sintonía discursiva, el Frente Renovador y el peronismo federal salieron a repudiar el anuncio del Gobierno nacional sobre tarifas, que incluye la posibilidad de pagar en cuotas, y con intereses, la boleta del gas correspondiente a los meses de mayor consumo. “Parece una provocación, con la nueva propuesta los argentinos pagarán más caro”, dijo Diego Bossio, del bloque Justicialista. “Es una broma de mal gusto, es otra tomada de pelo. Este es un gobierno usurero", sostuvo el massista Daniel Arroyo.
El miércoles, antes de la fallida sesión convocada por el kirchnerismo en la que la oposición no pudo reunir el quórum para debatir los proyectos anti tarifazos, los bloques que lideran la massista Graciela Camaño y el salteño Pablo Kosiner presentaron un proyecto para moderar el impacto de la suba de tarifas de todos los servicios públicos, en función del coeficiente de variación salarial.
Tras el fracaso de la sesión, los dos espacios anunciaron la convocatoria a un plenario de las comisiones de Obras Públicas y Defensa del Consumidor para el martes 24 a las 18.30. La reunión, según anunciaron, tendrá como objetivo emitir dictamen del proyecto de “tarifas razonables” presentado por ambos interbloques. La presentación del texto fue la primera acción coordinada de las bancadas tras la reunión de Gualeguaychú, en la que anunciaron su flamante sociedad política.
“Postergar o dividir los cobros de las facturas, con los brutales aumentos ya previstos, no solo no es ninguna solución, muy por el contrario, agrava la situación. Arman una contrapropuesta donde quienes adhieran al pago en cuotas deberán hacerlo con intereses. Es decir, pagarán más”, criticó este jueves Bossio. El Frente Renovador coincidió. “Acá no tenemos por qué convertir a los usuarios en deudores de empresas que no hicieron ningún esfuerzo y fueron cómplices de la situación de colapso energético en la que se encuentra el país, porque eso es lo que propone el gobierno ahora”, coincidió Camaño.
SESIÓN EN DUDA. Pese a las críticas a la decisión oficial, y hasta este jueves por la tarde, ninguno de los dos bloques había decidido presentar un nuevo pedido de sesión especial, aunque desde ambas bancadas confirmaron a Letra P que, en caso de que el kirchnerismo vuelva a hacerlo, darán quórum, de la misma forma que el miércoles, cuando sentaron a casi todos sus diputados en las bancas.
El Frente para la Victoria ya anunció que insistiría con el tema durante la sesión en minoría del miércoles. "Más allá de las presiones que puedan sufrir los gobernadores o las fuerzas políticas, el miércoles que viene vamos a volver a estar acá para tener quórum”, dijo Máximo Kirchner.
En el peronismo federal no solo cayó mal el anuncio del Gobierno por ofrecer pocas soluciones a los usuarios de servicios públicos. En el interbloque Argentina Federal se encendió la alarma cuando se supo que el presidente Mauricio Macri pretende que las provincias financien el bache fiscal que implicaría el prorrateo.