Crisis política en Perú

La sombra de Odebrecht revitaliza nuevo pedido de destitución de PPK

El pacto con Fujimori no parece alcanzarle al Presidente. Nuevas delaciones y la ruptura en el fujimorismo lo ponen nuevamente en escenario de caída. El silencio del vice.

Tras las nuevas revelaciones sobre corrupción en el vínculo de la empresa Odebrecht con el presidente Pedro Pablo Kuczynski, congresistas opositores volvieron a presentar un pedido de destitución (vacancia) contra el mandatario peruano. La clave será nuevamente el comportamiento de los legisladores de Fuerza Popular, la bancada que lidera Keiko Fujimori, que ya no responde al liderazgo del indultado ex presidente Alberto Fujimori, pero que, con 59 integrantes, siendo el bloque más numeroso.

 

En diciembre pasado, el pedido de vacancia – también motivado por el caso Odebrecht- no alcanzó los votos necesarios en el Congreso (dos tercios de los miembros, 87 congresistas) por la deserción sufrida a último momento por la bancada de FP, escisión liderada por el otro hijo de Fujimori, Kenji, que se opuso a la destitución. Pocos días después, Kuczynsky indultaba por razones humanitarias a Fujimori (condenado a prisión perpetua por corrupción y delitos de lesa humanidad) y dejaba en evidencia un pacto de mutua conveniencia con Kenji y Alberto Fujimori. 

 

Las protestas en las calles se hicieron sentir y la Justicia avaló nuevas denuncias contra Fujimori que podrían devolverlo a la cárcel. En ese marco, el pasado 2 de marzo, Jorge Barata, que fue el director de la empresa brasileña en el Perú y que está siendo procesado en Brasil, aseguró que para las elecciones de 2011 Odebrecht financió no solo a PPK sino también a Keiko Fujimori, Alejandro Toledo (prófugo en EE.UU.) y Ollanta Humala (preso en Perú), quien ganó esos comicios, y que en 2006 lo hizo con la campaña del ex presidente Alan García, ganador de esas elecciones.

 

Con esta nueva evidencia, primero la izquierda del Frente Amplio y después otros bloques salieron a reclamar la renuncia de PPK y avanzaron con otro proceso de vacancia, como se conoce en Perú a la destitución presidencial. Los últimos en sumarse fueron 50 de los 59 congresistas que siguen en FP. Sumados a los de las otras fuerzas opositoras, en principio llegarían a los 87 miembros necesarios para la destitución. 

 

 

 

En diálogo con este portal, el analista político peruano Uri Ben Schmuel afirmó que, si no se concretan nuevas escisiones en el bloque de FP (se habla de cinco miembros que podrían irse con Kenji Fujimori), se podría destituir a PPK y que los agentes económicos están dando muestras de intranquilidad, lo que da la pauta de que la vacancia es posible. “Hay un fujimorismo de Keiko que ya no responde a Alberto y que quiere sacar a PPK del Palacio Pizarro, incluso por razones personales más que políticas”.

 

Otro punto importante es que, a diferencia de lo ocurrido en el anterior proceso, esta vez el vicepresidente Martín Vizcarra se mantiene en silencio y alimenta las especulaciones sobre su comportamiento en caso de una eventual vacancia. En diciembre, tanto él como la vicepresidenta segunda, Mercedes Araoz Fernández, se alinearon con PPK y anunciaron públicamente que renunciarían si era destituido, con lo cual abrían la puerta a unas impredecibles nuevas elecciones presidenciales. Ahora, solo la vice ratificó esa postura mientras Vizcarra – que está en Canadá como embajador - aún no se ha expresado.

 

“Keiko ya ha dicho que Vizcarra -que debería asumir en caso de vacancia- gobernaría mejor que PPK e incluso adelantó que le daría respaldo parlamentario”, explica Schmuel y alimenta las especulaciones sobre la conducta del vicepresidente. La decisión sobre la votación final de la vacancia se definirá tras el interrogatorio al presidente Kuczynski en la Comisión Lava Jato, el próximo viernes 16.

 

Según la última encuesta de DATUM, un 63% de los peruanos considera que, dada la coyuntura y las últimas controversias sobre el tema Odebrecht, el mandatario debería renunciar a su cargo. Un 51% cree que PPK no llega a julio de 2021, fecha en que terminaría su mandato. También marca que PPK llegó este mes de marzo a 17% de aprobación (respecto de febrero, cayó 5%) y que la desaprobación, que estaba en 73%, subió a 79% en las últimas cuatro semanas.

 

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