El ministro de Justicia, Germán Garavano, defendió este jueves la decisión del presidente, Mauricio Macri, de postular a la titular del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Ciudad de Buenos Aires, Inés Weinberg de Roca, para ocupar el cargo que quedó vacante a partir de la salida de la ex fiscal kirchnerista Alejandra Gils Carbó al frente del Ministerio Público Fiscal, y desestimó las críticas de organismos de derechos humanos que advierten sobre los vínculos de su marido, Eduardo Roca, con la última dictadura militar.
“La verdad que desconozco eso, y me parece algo bastante desechable plantear, cuestionar a una persona por lo que pueda haber hecho su marido, o no. Cosa que desconozco, y más en este caso, cuando estamos hablando de una mujer”, respondió Garavano a una consulta de Letra P sobre los cuestionamientos de organismos de derechos humanos, que recordaron el rol de Roca como embajador ante la ONU durante la gestión de Leopoldo Galtieri, durante la última dictadura militar, en medio de la guerra de Malvinas.
Garavano fue el vocero del encuentro que tuvo lugar este jueves al mediodía en el despacho presidencial, convocado por Macri para oficializar su ofrecimiento, que había anticipado el miércoles en una entrevista televisiva.
Según explicó el ministro de Justicia, en las próximas horas el Presidente informará formalmente -a través del Boletín Oficial- la postulación de Weinberg de Roca como jefa de todos los fiscales, lo que abrirá “el proceso” formal de designación establecido en el decreto número 222, artículo 9, que establece el cronograma de convocatorias a apoyos e impugnaciones durante 15 días, previas al envío del pliego por parte del Poder Ejecutivo Nacional al Senado. Luego este debe analizarlo en la Comisión de Acuerdos, y posteriormente, tratarlo en el recinto. En esa instancia, la aprobación debe contar con los dos tercios de los votos de la cámara.
“En estos días, todos estamos comprometidos y el Presidente ha mandado un mensaje muy enfático en términos de la igualdad de las mujeres, del reconocimiento por su trabajo y su labor. Me parece que tratar de cuestionar a alguien por algo que pueda haber hecho o dejado de hacer su marido no corresponde bajo ningún concepto”, señaló Garavano.
El ministro dijo que primó en la decisión de Macri la condición de mujer de la jueza porteña. “Finalmente, el tema femenino fue uno de los importantes en la decisión. Después de haber designado a dos jueces hombres de la Corte (Suprema de Justicia nacional), habíamos asumido un compromiso de que en la próxima designación se iba a analizar la posibilidad de que fuera una mujer”, dijo.
Agregó, en diálogo con periodistas acreditados en Casa Rosada, al término de la reunión, que “la doctora Weinberg tiene además una mirada muy valiosa sobre este tema, con mucho trabajo realizado y un rol que ha excedido al país, porque ha tenido una actuación internacional muy relevante”.
“Eso le da prestigio a la función y jerarquiza a la mujer, en un rol muy trascendente. Esos fueron temas decisivos para la elección”, explicó el ministro.
“Puede ser que no sea muy conocida públicamente, pero en el ambiente judicial y académico sí es una reconocida jurista y me parece que es bueno, porque han primado los aspectos de su independencia funcional, del trabajo que ha realizado”, agregó Garavano.
Destacó que Weinberg “durante muchos años fue jueza del Superior Tribunal de la Ciudad y sus pronunciamientos no han tenido mayores críticas, al contrario” dijo, y destacó que “es una mujer con mucha determinación, experiencia y creemos que es una bocanada de aire fresco para liderar el combate contra la corrupción y el narcotráfico”.
Garavano rechazó las interpretaciones que señalan que la inclinación de Macri por una jueza externa al ámbito del fuero federal es un mensaje del Gobierno a la Corte Suprema por las últimas resoluciones que tomó.
“No, son cosas que caminan por andariveles separados. El Gobierno a través del programa Justicia 2020, ha llevado adelante iniciativas muy profundas como la ley de flagrancia, juicios unipersonales, en esa línea aplaudimos la iniciativa de la Corte de autoreformar el Poder Judicial”, señaló.
En ese marco, el funcionario dijo que con Macri y Weinberg, hablaron del “desafío” de la jueza en caso de ser aprobado su pliego en el Senado, para que “pueda liderar la modernización del Ministerio Público, pueda avanzar hacia el expediente electrónico, que haya mayor eficacia en el combate del delito, llegar a juicios orales en casos de corrupción y narcotráfico. Esa es la línea que va a impulsar, en caso de convertirse en la nueva procuradora”, afirmó el funcionario al término de la reunión en Casa Rosada.
